Iridium – Proyecto 12 (2014)

“Un manto de lava incandescente deslizándose por tu canal auditivo.”

Crítica escrita por Luishard

Amigos de Dioses del Metal, últimamente estamos viviendo una explosión cámbrica en el Metal nacional y encima con la calidad por bandera. Desde Extremadura (Badajoz), Iridium, nueva formación de César Ortiz, ex vocalista de Nocturnia y Bella Bestia, nos ofrecen su primer LP, autoproducido, Proyecto 12. En la trinchera desde 2011, anteriormente solo tenemos como muestra de su música un EP de seis canciones, Volver a nacer (2012) y por lo escuchado ahora, creo que nos han hecho sufrir con la larga espera.

Puede que el nombre lo hayan sacado de la constelación de satélites de comunicaciones que tiene Motorola alrededor de la tierra o del correspondiente elemento químico. En cuanto a la portada, Alfonso Burgos ha dejado su impronta. Parecen los sótanos de un laboratorio abandonado, donde se hubiera quedado olvidado algún experimento científico con humanos, en este caso, el número 12.

Muchos han pasado ya por mi Cueva del Metal, pero pocos como ellos, porque no es usual encontrarse un sonido con tanto Metal y Rock que trasmita una sensación tan Groove, tan rítmicamente expansiva, conservando la melodía y llevada por una voz alucinante. Por eso, a pesar de que lleva ya algunos meses entre nosotros, le he dedicado mi tiempo. Grabado en los estudios La Cueva (que coincidencia) de César en Badajoz, ha sido mezclado por José Rubio (Nova Era), por el batería de Humo Sapiens, José Ortiz, que hasta la llegada de Borja grabó los parches y por el mismo César.

Insisto en el sorprendente sonido de los diez temas. Todo el conjunto rezuma energía y mucha fuerza, y lo que es mejor, innovador y esto, tal como está la escena metalera hoy en día, hay que premiarlo. Comprobadlo desde el primer segundo de Dios, dando César un recital en registros y entonaciones. Es una pista muy directa, rebosando fuerza en cada riff.

Pero hay mucho más, potente y pegadiza base rítmica, ¡menuda batería!, intensas guitarras, riffeos pesados y graves, varios punteos extraterrestres, ritmos tirando a profundos, intensos, letras cargadas de mensajes, algunos al rojo vivo, muy, muy calientes como en el corte Tu piel, otras con sentido social, como Sin voluntad, toda una denuncia contra el consumo de drogas y que va ganando fuerza, fundiendo tu alma de acero con la rabia que nos muestra ese solo de guitarra.

Sorprendente es la voz, llena de matices, como los que se muestran en Lazos rotos, que nos da una vuelta de tuerca y se hace más metálica, gracias a unas guitarras que brillan aun más. La base rítmica se endurece en Tu canción, pero el punteo pretende fundirla. Esa voz se aleja siempre de los agudos pero dando muestra, como el mismo metal Iridio, de elevada resistencia a la corrosión, porque a veces me pregunto, cómo no se funden esas cuerdas vocales en algunas prolongaciones de frases hasta el infinito.

Proyecto 12 se me hace más ligera, quizás porque empieza veloz y lleva más melodía en letra y estribillo, en resumen es “ni un paso atrás, ni para tomar impulso”. Y bajada a los infiernos con Susurros, pero nosotros somos los aposentadores y disfrutamos con esas guitarras, estribillo gustoso y un mar de matices vocales. Ignorantes sube un peldaño en la complejidad, con melodía más difusa, menos mal que los instrumentos siguen creando esa atmósfera tan elaborada. Comparte algunos aspectos con Infierno, pero aquí las cuerdas me llegan más y hay más ritmo, notándose que mi cuello toca a degüello.

Finalizamos con Volver a nacer, rescatado de su EP, se nota el sonido actualizado y cuenta con la colaboración en el punteo de José Rubio, magistral. Destaco aquí bajo y baquetas, que conforman el armazón donde se lucen una vez más las guitarras, temazo.

Disco catalogado como perteneciente al tipo tres I. Innovador, Intenso, Interesante. Cada una de las veces que le he dado un repaso, he encontrado cosas destacables y en conjunto, me ha llamado la atención cada vez más. Para mí es de los notables altos, de 8 puntos sobre diez. Un saludo metálico a todos.