Frecuencia repetida
Crítica escrita por christian darchez
En esa realidad paralela en la que Geoff Tate debe vivir, cree que todo lo que hace puede llegar a ser tomado en serio por la crítica mundial y el fan desenamorado que lo abandonó hace años, ya sea por considerarlo responsable del desastre artístico de la banda o porque tampoco podía afrontar en vivo temas como Queen of The Reich, y bueno, el fan equivocado o no, sabe lo que quiere. Por eso, ahora el único Queensryche existente para ellos es con Todd Latorre, que pese a todo, lograron recuperar el sonido y les renovó las esperanzas. Más allá de lo que piense de Queensryche (2013) claro está.
Por otro lado, están sus incondicionales, que no les importa lo que edite y lo van a seguir, es más, creo que esta edición de lujo es más para ellos que para intentar recuperar a sus antiguos fans. Porque de otra forma, no se justifica el relanzamiento del regular Frequency Unknown, que al momento de su salida, no me había parecido tan terrible pero la realidad era otra: cualquier cosa que Geoff Tate pudiera grabar sería mejor que los horrendos American Soldier y Dedicated To Chaos.
¿En qué consiste la edición doble de lujo?, básicamente en que las canciones fueron retocadas otra vez, pero por una mano más experimentada que la del impersonal y vetusto Jason Slater, Billy Sherwood. Me parece justo destacar que Sherwood, después de todo, hizo un muy buen trabajo con la mezcla, mejoró mucho el sonido de la batería, suprimió los molestos solos de Kelly Gray, eliminó las impurezas dejadas por Slater, maquilló las canciones agregándoles colchones de teclado, en algunos casos incidentales y en otros amenazantes y sobre todo, Geoff Tate volvió a grabar las voces: prueba de ello está en la inicial Cold, que ahora suena más ruda y con mejores efectos, el inicio de teclados amenazantes en Running Backward, la oscura y bien Promised Land, In The Hands Of God que quedó casi igual, Life Without You y sus aires a Operation: Mindcrime mejoró mucho más, hasta Give It To You, con cambios de estructura ya no suena tan tonta, solo por citar ejemplos. Hay instancias que Sherwood no pudo salvar, como la horrible Dare. El problema es que, más allá del buen trabajo hecho por Billy Sherwood, es más de lo mismo, y dudo mucho que aquellos que piensen que Geoff está acabado, quieran siquiera acercarse a escucharlo. En sí, la composición, por más maquillaje que tenga, sigue siendo un tanto errática.
Lamentablemente Geoff Tate sigue alimentando a las voces detractoras, no sabemos que fue lo que le llevó a tomar esta iniciativa, pero quiero pensar que una despedida del nombre de la banda de toda su vida, si es así, no es muy digna que digamos. Al menos Geoff Tate en algo me hizo caso: le dio la patada en el culo a Jason Slater y encontró al productor ideal para él. Pero eso sí, que lo aproveche bien porque si no va a seguir en la misma. Billy Sherwood es un muy buen productor, pero tampoco hace milagros, o a lo mejor…
Disco uno (versión original)
1. Cold
2. Dare
3. Give It to You
4. Slave
5. In The Hands Of God
6. Running Backwards
7. Life Without You
8. Everything
9. Fallen
10. The Weight Of The World
11. I Don’t Believe In Love (bonus)
12. Empire (bonus)
13. Jet City Woman (bonus)
14. Silent Lucidity (bonus)
Disco 2 (mezclado por Billy Sherwood)
1. Cold
2. Dare
3. Give It to You
4. Slave
5. In The Hands Of God
6. Running Backwards
7. Life Without You
8. Everything
9. Fallen
10. The Weight Of The World