«Un poliedro de sonidos y estilos con los vértices en lo progresivo.»

Crítica escrita por Luishard

Amigos de Dioses del Metal, al calor de las Islas Afortunadas os traemos el segundo LP de los canarios G-Noma, publicado por la discográfica Rock CD Records el pasado mes de Mayo. Fijaros en los apellidos de los miembros del grupo y sí, son cuatro hermanos, por lo que todo queda en familia.

Esta banda que nació allá por 2003 en Lanzarote es ya conocida por su trabajo Origen publicado en 2011 y grabado en los estudios caseros de David Frías. Vuelven ahora más progresivos con su segundo LP titulado sugerentemente como Cauces y con el mérito de estar autograbado por ellos mismos, vemos por tanto que hay muchas ganas de seguir. Con ese título nos quieren decir que en el devenir de la vida nos encontraremos múltiple opciones, caminos y tendremos que elegir o renunciar según se mire.  Puede que hayáis escuchado de ellos en Internet la versión que hicieron de la banda sonora de la serie Juego de Tronos, muy atractiva y si no es así,  merece la pena buscarla en Youtube y ser uno de los más de  40.000 visitantes.

Es muy buena la idea de dar valor a la compra del CD original, con tres cuerpos y portada extensible cada uno de ellos, un libreto con las letras y gran diseño, espero que frenen las descargas ilegales. 

Iniciados en el Death Metal, han evolucionado hacia una combinación de varios estilos pero con una mayor proporción de inspiración en el Metal alternativo americano y el progresivo, por momentos es duro como el diamante y en otros te acaricia suave como el terciopelo. La ausencia de una batería en el grupo me llama la atención, más que nada porque me atrae dicho instrumento y porque el armazón de las canciones lo conforman sonidos de baquetas, por lo que supongo que estos son virtuales. Doce temas en cincuenta y cinco minutos encerrados en una portada que rezuma libertad, ¿se puede sentir uno más libre que en un globo?, por eso percibimos que a veces los temas terminan y queremos más.

La primera escucha me sorprendió por algunos silencios, largos, como el tema inicial o Las puertas del cielo y el fin de disco,  así como los ritmos veloces de línea de montaje y sobre todo el torneo de voces, una clara y más melódica contra la fiereza de otra, más gutural.

Comentaré primero las tres instrumentales, que separan cuatro canciones cada una de ellas, buena métrica. Con cuarenta inexplicables segundos de silencio, El viaje y posteriores sonidos húmedos de la naturaleza se abre el disco en un tema largo de casi cinco minutos, épico, aumentando en ritmo y complejidad, con un juego de guitarras  de alto nivel trabajando en graves y mucho teclado sintetizado. Luego tenemos en el puesto 6 a La Puerta del Cielo, más cañeray en el11 a la fugaz Estrellas sobre el Río, en donde a partir del 1´07” desaparecen los instrumentos para que llegue el sonido del agua, preludio del largo y silencioso final.

Puzzle Interior muestra cómo se alternan esas comentadas voces, con muchas influencias progresivas y alta dosis de fuerza. Más potente pero igualmente “progre” es Un cristal rompiéndose, con voces todavía más “especiales”, me acordé mucho de Soilwork. Mucho más cargada de sonidos graves y voz aguda está Cada Amanecer, con inicio de teclado a piano y más cercana al Death Metal en el ritmo, aun cuando hay melodías en los cambios a otros estilos que suavizan la apuesta. Estamos entrando en la mitad del disco y eso se nota en que los temas son más atractivos.

Casi sin pausa llega Hasta el fin, iniciada como la anterior, a piano, en un gran toma y daca instrumental, muy enérgica y con alternancias en los tiempos. Después de la Puerta del cielo ya comentada se inicia Atado al ayer, con algo más de seis minutos de contundencia sin paliativos, cercano al Metalcore y en donde teclados y guitarras alternan ritmo y melodía. Dentro del Sol es el single adelanto, con letra continuista sobre ese viaje y metida en la música a calzador por la dispersa melodía. 

Se acaricia más Pop y mucho teclado en Hielo entre los dos, sentimental, con simplón solo de seis cuerdas. Sonido lleno de energía y viveza, deathmetalero casi salvaje alternando voces limpias y guturales en Comienzo a vivir, con inicio suave y desvío a vorágine, tal como la vida misma de algunos. Tras la última instrumental llegamos al final con el tema homónimo Cauces, otra vez flirteando más con el Pop, en duelos de cuerda y teclados sin ganador aparente, bajo una rítmica potente.

Este disco va a necesitar varias de vuestras escuchas para apreciar todo lo que esconde, para mi ha sido como una búsqueda del tesoro, complejo, distinto, debes tomarte tiempo, sin prisas, aun así pudiera parecer largo o monótono porque los temas te pueden  parecer iguales en la estructura y hay algunos más flojos, pero pienso que puedo darles un 7,5 puntos sobre 10 puntos sin que me echen por la borda del globo de la portada. Un saludo metálico a todos.

Tracklist

01. El viaje
02. Puzzle interior
03. Un cristal rompiéndose
04. Cada amanecer
05. Hasta el fin
06. La puerta del cielo
07. Atado al ayer
08. Dentro del sol
09. Hielo entre los dos
10. Comienzo a vivir
11. Estrellas sobre el río
12. Cauces

Componentes

  • Israel Frías. Voz y teclados
  • Airan Bolaños. Voz secundaria
  • David Frías. Guitarra
  • Adrián Frías. Guitarra
  • Jacob Frías. Bajo

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