¨Segundas partes si pueden ser buenas!¨
Crítica escrita por christian darchez
Calificación: 10/10. Género: Acción. La trama tiene esta vez a Kenshin Himura en su viaje por desbaratar los planes del despiadado villano Makoto Shishio por derrocar al gobierno Meiji y así reinar Japón con mano dura y derramamientos de sangre. La dirección esta vez hizo que la peli tenga mucho más acción, era difícil adaptar los casi 40 capítulos del arco argumental de la saga de Shishio en casi 3 horas, por lo que los productores optaron por la vía sencilla y dividirla en 2 películas. Takeru Sato afianzado como Himura esta vez tiene más responsabilidad física que interpretación actoral, lo tenía muy complicada pero el actor se las arregló de 10 frente al desafío que esta secuela le planteaba. Yosuke Eguchi como Saito Hajime, que como era de esperarse, esta vez tiene más peso en la trama. Me encantó lo que hicieron en esta secuela con Aoshi Shinomori que en el manga y anime era un sujeto perturbado, acá lo convirtieron en un psicópata!. El combate que tiene con Okina hacia el final es espectacular.
Sin duda, quien la tuvo más complicada fue Tatsuya Fujiwara en el rol del cruel Shishio y que muchos le pegaron por carecer de matices y expresividad, objeciones en las que no estoy para nada de acuerdo, ya que su personaje es un sujeto con el cuerpo incinerado y vendado símil momia; además su maldad reside en la estrategia que en las acciones propias y a mi entender Fujiwara da una buena interpretación del villano que todos conocemos. Pareciera ser que el Guason de Nolan debiera ser el modelo de villano para todo cuando no es así.
El éxito de la peli fue mucho mayor que el de su predecesora y si bien hay cambios con respecto al manga y el anime, el público nipón los aceptó sin problemas. Es sabido que el universo del cine no es el mismo que el de las fuentes originales, pero con lo visto alcanza para capturar la esencia de la obra, y eso que le quitaron los toques de fantasía para darle un enfoque mas realista. Nada que discutir.
La única contra de la peli es que cuando termina te deja con ganas de más, pero eso es buena señal y nos da la pauta que se trata de una gran secuela de aquella adaptación que sorprendió allá por 2012 y que ningún fan del samurai pelirrojo debe pasar por alto.