Vinum Sabbatum – Apprehensions (2016)

“Vuelo a los sicodélicos setenta”

Por Watchtower

La tradición metálica de la cual me considero fan acérrimo, tiene sus raíces asentadas en aquellas bandas precursoras de los sonidos más densos y pesados que nacieron o alcanzaron la fama a fines de los setenta y/o principios de los ochenta… pero esas bandas también estuvieron inspiradas por nombres que -aún sin contar con un término acuñado que describiera de manera correcta su sonido o al menos no con el que las reconocemos hoy en día- de una u otra forma también forman parte de la génesis más arcaica y primigenia del género que hemos hecho parte de nuestra existencia. Nombres como DEEP PURPLE, CAPTAIN BEYOND, ATOMIC ROOSTER, URIAH HEEP, IRON BUTTERFLY, HAWKWIND o incluso BLUE CHEER (dejando de lado la obviedad que representan BLACK SABBATH o PENTAGRAM) son algunos de los más recurrentes que aparecen cuando escarbamos más atrás de la segunda mitad de los setenta.

¿Y por qué el preámbulo?. Porque es necesario dar un contexto acorde para presentar el último trabajo de Vinum Sabbatum, banda finlandesa que acaba de lanzar Apprehensions, un álbum que nos transporta a esos años y nos hace volar por parajes en donde el sonido ambiente son las densas, pero también sicodélicas estructuras que dichas agrupaciones crearon durante su época de mayor apogeo. Con canciones como «Shadows of Tears«, «Constellation Dust» o «Profane Soil» es imposible no recordar una buena parte del legado que dejó URIAH HEEP, principalmente durante los setenta. Son varias las similitudes, pero las que más destacan son las líneas vocales, el trabajo en guitarras y, por sobre todo, los teclados, los que llegan a recordarnos de manera inexcusable a lo hecho alguna vez por el gran Ken Hensley. Con eso en mente disfruten con canciones como la ya mencionadas o con la maravillosa «Creation Machinery«, en donde de la amalgama que producen los riffs y el teclado salen a relucir algunos de los momentos más pesados del álbum, en conjunto con melodías que los acercan a lo primeros BLACK SABBATH incluso, oscuras y densas, pero siempre inmersas dentro de un velo sicodélico generado por el característico sonido Hammond que marca fuerte su presencia a lo largo de todo el disco. Si no le temen a las canciones largas, dense un vuelo con «Dark Mastermind«… preparen su mente para el despegue y disfruten. ¡Es impresionante!.

Si gustan de las bandas nombradas o simplemente del Rock pesado fuertemente influenciado por la música de la primera mitad de los setenta y mezclado con una pizca de sicodelia, háganse un favor y no dejen pasar un trabajo como Apprehensions. En lo personal, Vinum Sabbatum ha ganado un nuevo fan con este disco. Desde el primer minuto hasta el último segundo, un placer para todos quienes disfrutamos y apreciamos los orígenes de los géneros musicales que nos convocan.