“El generador progreta se pone otra vez en marcha”

Reseña de Christian Dárchez

El cantante y guitarrista de origen sudafricano Trevor Rabin pese a que arrancó su periplo musical a mediados de los 70’ con Rabbit con quienes editó 2 discos que fueron muy bien recibidos tanto en la crítica como a nivel comercial en su país natal y luego siguió como solista, la notoriedad recién le llegó en los 80’ cuando fue reclutado por los ingleses Yes tras el corto parate del grupo tras el no muy bien recibido por los fans “Drama” (1980) y justamente para desempeñar la no muy fácil tarea de reemplazar a Steve Howe (que por aquel entonces ya formaba parte de Asia) en las 6 cuerdas. Para cuando llegó “90125” (1983) disco en el que además de la guitarra y dar apoyo vocal a Jon Anderson también colaboró activamente en la composición y arreglos logrando un disco que aunque estaba emparentado con la esencia progresiva d ellos 70’ su enfoque era más bien ochentero y cancionero, el mismo fue todo un éxito tanto en la prensa como a nivel comercial gracias a hitazos como “Owner of a lonely heart” y “Changes” con millones de discos vendidos y una gira monstruosa, con entradas a sus shows que se agotaban enseguida e incluso fueron la primera banda inglesa en tocar en mi Argentina natal en 1985 tras el conflicto bélico de Malvinas en 1982 en el que se había prohibido la música en inglés, por lo que la banda para capitalizar más ese éxito editaron el disco en vivo “90125 live: the solos” a fines de 1985. Para el siguiente disco había que revalidar los laureles que la reformulación ochentera de Yes había logrado con “90125” y aunque “Big generator” (1987) no fue para nada un mal disco se los notó engolosinados y profundizaron mas el costado popero y hitero del disco anterior, algo que no cayó muy bien en los fans. Si bien tuvo un éxito comercial nada desdeñable lo cierto es que las ventas fueron mucho menores en esta oportunidad, tal vez fue por eso que los miembros de la banda decidieron tomarse un descanso para concentrarse en otros proyectos, por su parte Ravin hizo lo propio editando “Can’t look away” (1989) su cuarto disco solista con el cual gozó de un éxito moderado. Ya entrados en los 90’ una noticia sacudió a los cimientos de la escena: la formación de Yes de aquel entonces unía fuerzas con miembros clásicos de los 70’ (Steve Howe, Bill Brufford y Rick Wakeman) para editar un disco. Recordemos que fue en los primeros años de los 90’ y todavía el Grunge no explotaba como la nueva gran cosa de la década (Corrijo: lo fue por lo menos por 4 años) y una noticia como esa generó mucha expectativa en la prensa y los fans; lamentablemente cuando llegó el desparejo “Union” (1991) dichas expectativas se vinieron abajo y las reseñas fueron mas bien mixtas a negativas, pero eso no impidió que Yes girara por todo el mundo en una muy exitosa y larga gira que duró unos 2 años. Sin embargo el mayor golpe que sufrió Yes llegó con “Talk” (1994) durante la peor crisis sufrida por las corrientes clásicas del rock y metal, el cual recibió criticas en su mayoría negativas, lo que terminó con la estadía de Ravin en el grupo. Lejos de quedarse quieto, el musico sudafricano encontró otro pasatiempo como compositor para películas como lo fueron “Armagedon” (1998) “Alerta en lo profundo” (1999) “Fuerza G” (2009) “Ajuste de cuentas” (2013) y “The misfits” (2021) por citar unos pocos ejemplos, y además en 2012 editó su quinto disco solista “Jacaranda” (2012) y en el ultimo tiempo se reunió con Jon Anderson y Rick Wakeman para una gira rememorando temas de Yes en vivo. Y así llegamos a 2023 que Ravin ha vuelto al estudio y no precisamente a componer algún score para alguna peli sino a grabar nueva música y aunque no creo que vaya a quedar entre lo mejor del año ni mucho menos será recordado entre lo mas destacado en la larga trayectoria de este particular músico, el mismo ofrece un buen entretenimiento.

“Rio”, sexto disco del cantante y guitarrista sudafricano Trevor Ravin, retoma a modo de revival la esencia de discos como “90125” y “Big generator” de la gloria inglesa, obviando el costado Hard rockero de “Can’t look away” y la veta experimental e instrumental de “Jacaranda”. A nivel compositivo no hay demasiadas sorpresas, de hecho hoy lo podemos catalogar como Neo-Progresivo sin ningún problema, pero la buena noticia es que Ravin (como lo pudimos notar en la gira con Anderson y Wakeman) a sus 69 años aún posee intacto su tono vocal como en sus buenas épocas y su pluma creativa sigue con la misma calidad y efectividad de siempre. Ya desde la entrada con la muy rítmica Big mistakes en el que Ravin despliega su voz personal y alta sobre su guitarras ligeras y coros en plan poperos sumado a un solo procesado pero bien ejecutado pasando por las escalas en plan pentatónicas de la muy progresiva Push y los aires folk en la tranquila Oklahoma. Ejercicios en plan noventeros como en la marcha acústica de Paradise acompañada por los coros superpuestos muy en la onda de “90125”. La cosa se pone mas movida con la más rockera Thandi aunque el sonido de las guitarras se muestra más deudora de Rush que de los propios Yes y el country acelerado de Goodbye aunque su estribillo no cuaja demasiado. These tears se anota entre los momentos menos destacados donde la imitación del Roger Waters post Pink Floyd le quedó muy forzada. Para el final la cosa vuelve a su cauce con piezas mas progretas como lo es la inquieta Egoli y el Blues intrincado de Toxic que lejos de ser las ideales para cerrar al menos cumplen con su cometido.

La producción jugó totalmente a favor del enfoque elegido por Ravin para esta ocasión donde no dejó nada librado al azar, tanto como instrumentista, cantante y arreglista; aunque la portada…bueno las he visto peores pero no es algo que se espera de una leyenda como Ravin. Sin presentar novedades sustanciosas (aunque es su primer disco en ser enteramente cantado no varía un ápice la cosa) “Rio” demuestra que Ravin aun tiene mucho para decir, o mas bien cantar. Los fans de Yes y de Ravin seguramente lo van a recibir con los brazos abiertos mientras que para los mente abierta de siempre se pueden acercar sin miedo.

Trevor Rabin – voz, guitarra, bajo

Liz Constantine – coros

Dante Marchi – coros

Lou Molino – batería

Vinnie Coliuta – batería

Canciones

Big Mistakes

Push

Oklahoma

Paradise

Thandi

Goodbye

Tumbleweed

These Tears

Egoli

Toxic

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