«Abren el laberinto de melodías con un puño de Metal”
Crítica escrita por Luishard
Amigos de Dioses del Metal, pocos grupos pueden “presumir” de permanecer luchando de forma continua en la trinchera desde 1988, sin renacer ni resucitar, pero estos valencianos de Total Death siguen aquí, junto a nosotros. No os perturbéis por el nombre, puede que en sus inicios trabajaran más en la escena Grind y Death porque el vocalista cantaba gutural pero ahora están más afianzados en el Thrash Metal, pero con un estilo propio.
Actualmente con un solo miembro fundador, el bajista Jorge Vila y mandando en el micro desde 1991 César Soriano, fueron pioneros del Metal extremo. Con una amplia discografía a sus espaldas, fruto de esa primera época fue la maqueta Alcoholic Death, autoeditada (1990), que con respecto a La muerte os hará libres (2007) o al penúltimo disco Santa muerte (2011), ha habido una evolución brutal, con un último salto en Ciudad matadero (2014) hacia la calidad en lo que respecta al sonido, muy directo y real, donde cada instrumento y voz no luchan a muerte por el protagonismo, porque todo está bien repartido. Será porque, aunque grabadoal igual que el anterior LPen los Fucked Noise Studios (Valencia), propiedad de la banda, se le ha proporcionado un toque más profesional y cuidado, al realizar la mezcla y masterización Andy Classen (ex-Holy Moses) en los Stage On Studios de Alemania (Destruction o Tankard).
Para conocerlos más a fondo tenemos varias opciones. Además de poder verlos en directo, porque están actualmente recorriendo diferentes ciudades en la gira Bestias del Poder acompañando a Zarpa, coincidiendo con el 20 aniversario se editó el DVD «20», con 20 temas entre directos y videoclips de diferentes épocas del grupo. Sobre su historia, puedes leer el libro que hay en descarga directa y gratuita «TOTAL DEATH: 25 años en el lado oscuro del metal» aquí, y ver el documental del mismo nombre aquí.
También puedes echarle un tiento a la discografía oficial completa disponible en su bandcamp.
Publicado en mayo del año pasado y autoeditado, Ciudad matadero tiene la curiosidad que está versionada en inglés en formato vinilo, Slaughter City y que para promocionar ambos, se grabaron dos singles, uno en cada idioma, con un tema inédito y versiones de Leño y Kiss respectivamente, para auténticos coleccionistas, lástima que solo fueran virtuales.
Tras esa portada sanguinolenta, con la Parca cabalgando por encima de una multitud de seres humanos, en un ambiente similar al infierno de Dante, se esconden diez temas que hacen gala de una crudeza que sin ser extrema, es la mejor apuesta ambiental del disco, como la que se exhibe a llamaradas en La Llamada, alternado partes cadenciosas con otras más veloces. En esta marmita el componente principal es el Thrash como en Engendro Infernal pero hay otros ingredientes en los ritmos y melodías, como el Hardcore o el Death que le dan una contundencia peculiar, más profunda y plomiza, como la que se expone en Instinto carnicero o en la destripante Asfixia, quizás más diluida en melodía.
Destacaría dos cosas, la primera es esa voz descarnada y con mucha entrega por parte de César, y la segunda son unos punteos que sin ser numerosos, me parecen “infernales”, como el que se desarrolla a partir del 1´30 del corte Alma en Pena. Otros detalles son el buen acústico en los primeros compases de La Resurrección del Mal y con mejor ritmo instrumental, muy pegadizo.
Si a lo anterior le sumas algunos estribillos para fundir escenarios, como el del tema Incinerador, con el que sientes el calor en tu piel, ¡¡un misil de acero!!, gruesos riffeos selectivos bien descubiertos y atmósfera metálicas variadas, tenemos un trabajo atractivo aunque no recomendable para iniciados. Hay que saber escuchar Metal para sacarle todo el partido a este trabajo.
Afilando baquetas José Manuel en el comienzo de En la Oscuridad, veloz y con otro solo de guitarra de múltiples acordes. Mírame tiene partes más digeribles en la zona Thrash, pero es un corte de compleja asimilación. En cuanto a Réquiem, es una instrumental plena de relajantes guitarras, con las que se despiden de nuestros fatigados tímpanos.
Disco diverso y plural, sin ser anárquico. Sus escuchas han sido como intentar descubrir los trucos de un tahúr de cartas, hay que estar muy atentos a la letra y música para no perderse detalles interesantes, así que esa media de mis variables me sale de 7,75 puntos sobre diez. Un saludo metálico a todos.
Canciones
1. La Llamada
2. Instinto Carnicero
3. Engendro Infernal
4. Asfixia
5. Alma en Pena
6. La Resurrección del Mal
7. Incinerador
8. En la Oscuridad
9. Mírame
10. Réquiem
Componentes
- César Soriano. Vocalista
- Boro Metal. Guitarra
- Gabo Escribano. Guitarra
- Jorge Vila. Bajo
- José Manuel González. Batería
Oficial