Calificación: 3/10 Genero: Drama/Biopic

«Jesús me desconoce»

Reseña de Christian Dárchez

 

Hasta Josh Trank, director de ¨Los 4 fantasticos¨ (2015) ¨Capone¨ (2020) hoy conocido como ¨El Uwe Boll de Hollywood¨, podía haber realizado un film mucho menos chato, redundante y superficial si le encargaban la dirección de esta historia. Y todo el trasfondo del infame ¨Club 700¨ tenia uno bastante interesante: la pareja conformada por Tammy Faye y su marido Jim Bakker fueron uno de los grandes pioneros de los programas religiosos televisivos a mediados de los 80’ merced a sus insufribles sermones y las horribles canciones cristianas de la excéntrica Tammy. El culto de la pareja gano una enorme popularidad con su programa que hasta lograron tener parques tematicos cristianos como una enorme exposición en los medios que veían tanto a Tammy como a Jim como celebridades; pero el castillo de naipes que construyo la pareja se vino abajo cuando se supo que el ¨Club 700¨ no solo malgastaba los donativos de sus fieles en lujos y demás cosas sino también usaban la organización como medios para malversar fondos y lavar dinero. Lo que llevo al arresto de Jim Bakker y a una sentencia bajo cargos de estafa y lavado de dinero entre otras tantas cosas. Como dato curioso, Genesis prácticamente se basó en el ¨club 700¨ para componer ¨Jesús he knows me¨ de 1991 a modo de sátira. Tammy Faye (fallecida en 2007) por su parte si bien evito ir a la cárcel su imagen pública quedo por los suelos, hasta que en 2010 se estrenó el documental ¨The eyes of  Tammy Faye¨ donde la predicadora ofreció su versión de los hechos y terminó redimida ante la opinión pública y mas porque ella siempre se mostró a favor de los derechos LGTB y la asistencia a los enfermos de SIDA. Acerca de esto voy a hacer un inciso: en mi Argentina natal en 2012 la pareja conformada por el pastor Jesús Olivera y su esposa Estefanía Heitt secuestraron y torturaron durante 3 meses a Sonia Molina (a quien habían convencido de unirse a su culto religioso como también a entregarles todo lo que ella tenia) tanto física como psicológicamente donde llegaron a grabar el martirio al que era sometida Sonia. Un caso terrible que fue bastante cubierto por los medios tanto de mi país como del resto de Latinoamérica, pero aun así hay gente que asegura que Estefanía también es una victima de su esposo solo porque en su Blog personal ella se manifestaba en contra del nazismo y daba consejos de auto ayuda (casi un paralelismo con Tammy Faye que predicaba a favor de los LGTB y el amor al prójimo entre otras), incluso cuando en un video (muy desagradable, por cierto) se la ve junto a su marido torturando física y psicológicamente a Sonia estando totalmente narcotizada y mojada por su propia orina. Hasta el dia de hoy Sonia sostiene que Estefanía al igual que su marido (que cumplen una condena de 13 y 18 años respectivamente) es igual de culpable y actuo por voluntad propia. Eso también abre otro inciso sobre la historia de Tammy Faye: dudo mucho que las victimas de estafa y manipulación de su fe por parte del ¨Club 700¨ todavía vean a Tammy Faye como una pobre victima. Algo que ni en el documental de 2010 y menos en esta película (que llego a los cines argentinos recién este año) se calentaron en tratar.

¨The eyes of Tammy Faye¨ basado en el documental homónimo de 2010, justamente tiene la misma finalidad de dicho documental: dejar a Tammy Faye como la pobre victima de las manipulaciones y manejos fraudulentos de su marido el predicador Jim Bakker. Algo que cumple con el standard de pensamiento moderno muy de moda en Disney donde la mujer aunque sea autora o participe de cosas terribles siempre es la victima y la figura del hombre es el villano culpable de todo mal  como si fuera el anillo de Sauron que corrompe a quien se lo ponga. Hace unos años lo vimos con la bastante floja ¨I, Tonya¨ (2018) de Craig Gillespie donde pretendió redimir a la ex patinadora Tonya Harding que fue vetada de por vida a competir después de que se supo que obstaculizo la investigación del ataque a su rival Nancy Kerrigan, perpetrada por el novio de Harding y en esta oportunidad lo hacen de un modo mucho mas burdo y superficial.  Acá Tammy Faye es retratada como una pobre tarada que nunca se da cuenta de nada aun cuando muchas cosas ocurrían en sus propias narices pero estaba muy preocupada en disfrutar de los lujos que obtenía con el infame ¨Club 700¨ a costas de la fe de la gente . Ese es otro problema de la constante victimización de la mujer que se hace en este tipo de Biopics: mas que redimirlas dejan a la figura de la mujer como seres de nula inteligencia que no saben donde están paradas o carentes de sentido común y decisión propia; en el fondo esa visión termina siendo mucho mas machista que redentora. Al magen de que el guion es un desastre que no profundiza nada de los temas que toca, la dirección de Michael Showalter (¨Un amor inseparable¨) lleva adelante el relato de un modo torpe y chato donde los actores hicieron lo que pudieron pero en mi opinión no alcanzo, como le ocurre a Andrew Garfield, el gran villano Jim Bakker de esta historia aburrida y sin gancho. Jessica Chastain si bien va de acuerdo a la idea del personaje mas que leer el guion parece que solo tenia la idea de cómo era Tammy tanto dentro de las cámaras como afuera de ellas. Se que es una muy buena actriz pero aca la noto mas bien improvisando sobre la marcha y fallando en muchos momentos, por esta razón su nominación y posterior premiación en la bochornosa gala de los Oscars 2022 me resulta mas  incomprensible que su Oscar por ¨Zero dark thirty¨ (2012). Otro aspecto negativo de la peli es su pesimo trabajo de maquillaje donde el relleno en el rostro de Chastain se ve cutrísimo como si fuera un sketch humorístico de ¨Saturday night live¨, cuesta entender el Oscar que también recibieron en este campo, pero de una academia que para levantar el índice de audiencia monto un espectáculo lamentable como la bofetada actuada de Will Smith a Chris Rock (hasta la bofetada de ¨caranchoa¨ fue mas creíble, ¡no jodamos!) hoy se puede esperar cualquier cosa. Incluso si en la próxima edición ponen a una actriz a hacer sexo oral en medio de la ceremonia con tal de ganar un punto de rating.

¨The eyes of Tammy Faye¨ tenia todos los ingredientes para ser una peli interesante sobre un caso controvertido y que afectó a muchísimas personas que en mi opinión fueron las verdaderas victimas del culto fraudulento ¨Club 700¨ pero solamente se regodearon en la constante victimización de Tammy Faye con un relato aburrido, superficial y chato típicamente hollywoodense y que encima estuvo pesimamente realizada en los aspectos técnicos. Pero bueno, como dije arriba es el tipo de propuestas que la decadente academia busca nominar y premiar en espectáculos lamentables como la ultima que fue para el olvido, igual que esta peli…

 

 

 

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