Un fénix de alas deslucidas”

Crítica escrita por: Christian Darchez

La historia de los Franceses Sortilege se inicio allá por 1980 bajo el nombre de Bloodwave aunque a fines de 1981 cambiaron al nombre con los que al menos hoy se los conoce. Pronto se ponen a componer material propio de lo que seria su primer EP ¨Sortilege¨ (1983) de un Heavy Metal potente y veloz al mismo tiempo que no descuidaba la melodía que no tardo en llamar la atención de los sellos de su país. No por nada este material era uno de los preferidos por el fallecido Chuck Schuldiner de Death, tanto así que homenajeo uno de los temas haciendo una intro similar en el disco ¨Scream bloody gore¨ (1987). Un año después aparece su LP debut ¨Metamorphose¨ que cimentaba aun más su propuesta potente, melódica y aguerrida gracias a una mejor producción. Como el disco fue grabado en su idioma natal y viendo el poco interés de su sello en promocionarlo fuera de Francia, la banda se traslado a Alemania para grabar una versión en ingles del mismo y aunque al cantante Christian ¨Zouille¨ Augustin no se le daba mucho el ingles la versión vendió bastante bien en otros países. Para su segundo disco ¨Larmes de heroes¨ (1986) la banda baja unos cuantos decibeles con respecto a la potencia pero aumento mucho mas la complejidad en su música acercándose mas a un Queensryche o Heir Apparent por citar ejemplos, sobre todo en la labor de Zouille que se lo escucho mas agudo todavía. Nuevamente la banda decide grabar el material en ingles cómo ¨Hero’s tears¨ ese mismo año. A pesar de las buenas reseñas del disco, los fans no vieron muy bien el rebaje de la potencia (algo injusto ya que se trato de un muy buen sucesor de su debut) y el disco no rindió a nivel comercial. Este fue un duro golpe para el grupo que también cansados de lidiar con las discográficas decidieron separarse a fines de 1986, ¨dejando así clásicos de culto para posteridad metalera¨. Y lo digo así ¨entre comillas¨ para que entiendan mejor cuando desarrolle el análisis del contenido de este material. Tuvieron que pasar un buen puñado de años para que la banda volviera a reformarse en 2019 viendo el muy buen pasar y la revaloración que están teniendo ahora las bandas que en su momento no tuvieron la atención que merecían. Pero esta reunión destapo un culebrón bastante raro y confuso: primero se anuncio que un ex miembro (nunca aclararon de quién se trataba) se hizo con el nombre de la banda y al mismo tiempo este aseguro que Zouille había abandonado la misma. Algo que fue negado por el mismo cantante, que ni corto ni perezoso formo su propio proyecto llamado Sortilège feat. Zouille. La confusión viene por el lado de que este disco se edito bajo el nombre de Sortilege a secas, por lo que mas de uno pensaría que fue el mismo Zouille quien se apropio del nombre (si ustedes no lo entienden yo menos!). Yendo a lo estrictamente musical y después de escucharlo no puedo dejar de sentir pena porque el mismo Zouille en este ¨Phoenix¨ no hizo otra cosa que arruinar el recuerdo de clásicos de culto muy queridos en el metal.

¨Phoenix¨, no se trata en si de un cuarto álbum sino mas una revisión de temas clásicos del grupo mas el agregado de 2 temas nuevos. Sí, una jugada que por lo general nunca deja bien parada a una banda puesto que los clásicos, salvo en vivo, no se tocan. Sí, ya se, cada uno puede hacer con sus canciones lo que se le cante los cojones porque son suyas, pero después hay que aguantársela cuando llegan las criticas. Harta fueron las veces que mencione que las canciones son productos de su tiempo y no solo nos hacen sacudir la cabeza o hacer cuernitos sino que las mismas nos sitúan en tiempo y espacio como contexto histórico de cada banda. Aparentemente a Zouille no le importo demasiado esta cuestión y pese a juntar a un buen plantel de músicos que hacen una labor encomiable a nivel interpretativo, el paso del tiempo hizo estragos en las cuerdas vocales de Zouille y ese tono limpio, agudo, elegante y altisonante que ostentaba en los 80’ (por obvias razones) se ha ido para siempre y en su lugar tenemos un constante gruñir agresivo y que si bien en los tonos medios modula aceptablemente, sus incursiones agudas de tan forzadas que se escuchan dan ganas de llorar. Quienes descalificaron mi reseña de Helloween diciendo que John Cyriis hasta desafinó en el ultimo de Agent Steel ¨No other godz before me¨ cuando en realidad John a nivel vocal esta intacto pero problema fue su falta de practica para encarar material nuevo, cuando escuchen lo que hizo Zouille en las canciones se lo van a pensar mejor. La masacre de los clásicos de culto comienza con la acelerada D’ailleurs que suena potente y moderna pero es el mismo cantante quien hace agua en la canción, como dije arriba la banda que lo acompaña no lo hace mal pero dado la pobre performance de Zouille las canciones tienen que sonar unos tonos mas abajo perdiendo el brillo de otrora. Paul Di Anno (mas allá de lo que se piense de el) en ¨Tales from the beast¨ (2019) manejo mucho mejor estas cuestiones. Ni siquiera en canciones menos intensas como el medio tiempo de sabor hard como la acá bautizada Progeniture destructice donde en las partes mas agudas de tan forzadas que suenan parece que van salirles las amígdalas por la boca. Al menos en Delire d’un fou en tonos medios lo hace aceptablemente (digamos) pero la vuelve a cagar hasta el cuello con la acelerada Message. Sobre las canciones nuevas Phoenix y Tourjours plus haut debo decir que al menos suenan bien porque se trata de material nuevo grabado para la ocasión y la voz de Zouille suena funcionales a las mismas con respecto a la potencia, tanto que si se quería largar un eructo en la misma seria aceptable. Hubiera sido mejor ir por esa vía en lugar de asesinar su propia obra como lo hace con Mourir pour une princesse, Gladiateur, Chase the dragon o en la clásica Sortilege son realmente penosas y duras de escuchar. 

La producción del disco por lo menos se oye potente, moderna donde los instrumentos pese a recrear canciones de hace mas de 30 años hacen una labor encomiable, pero repito: acá quien la pifio fue Zouille que en lugar de lanzar material puramente nuevo y establecer un Sortilege 2021, tal como hizo Dirk Schroder con Iron Angel en su regreso ¨Hellbound¨ (2018), no tuvo mejor idea que asesinar sin piedad con su maltratada voz a esos grandes clásicos de culto que la banda y el propio Zouille forjo en los albores de los 80’. ¿Piensan que me ensañe demasiado y soy un irrespetuoso? Si ni el mismo respeto su propia obra! Háganme el favor de escuchar el primer EP y los 2 discos editados en los 80’ y verán que lo expuesto acá no son simples exageraciones…

Sortilege:

Zouille – Voz

Olivier Spitzer – Guitarra

Bruno Ramos – Guitarra

Sébastien Bonnet  – Bajo

Tracklist:

1 D’ailleurs

2 Progéniture destructrice

3 Délire d’un fou

4 Messager

5 Phoenix

6 Majesté

7 Mourir pour une princesse

8 Civilisations perdues

9 Gladiateur

10 Quand un aveugle rêve

11 Toujours plus haut

12 Marchand d’hommes

13 Chasse le dragon

14 Sortilège (2021)

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