“Tenebroso y salvaje”
Crítica escrita por lachicamapache
El proyecto musical alemán Schwarzer Engel lleva ya un largo recorrido a sus espaldas, desde que salió su primer EP en 2010, son más de seis años de crecimiento musical para este “Ángel Negro” hasta llegar al quinto disco, que salió el pasado 29 de julio y que funciona como continuación del Imperium I que vio la luz solo un año antes.
Lo especial de Schwarzer Engel recae en que su Industrial Metal, tiene mucho más de Symphonic y de Gothic de lo que una oyente primeriza del género (como yo) podría esperar, porque, ¿a quién le hablan de Metal alemán y no le viene Rammstein inmediatamente a la cabeza? Culpable.
Tras un breve proceso de investigación descubro algo más importante y significativo sobre la banda, y es que se trata de un proyecto en solitario de Dave Jason en el que él solito se encarga absolutamente de todo, es decir, el concepto “banda” no es aplicable para nada a partir de este punto. Desde luego, Jason está más que curtido en marcar la diferencia para no caer en la gran etiqueta que supone “sonar como Rammstein”, y la verdad es que obtiene un resultado bastante exitoso con su Metal Industral teñido por profundos toques de la Dark Wave. En definitiva, el conjunto general de composiciones que completan este Imperium II: Titania es de lo más variopinto.
El disco empieza con una intro al más puro estilo Van Helsing, en el que los violines crean un fondo misterioso sobre el que chirrían las bisagras de las puertas por las que nos adentramos mientras graznan los cuervos de Poe. Tengo que reconocer que mi alemán ya no es lo que era y las narraciones de Dave Jason en esta parte del disco son todo un misterio para mí, sin embargo, está más que claro que nos propone una historia en la que predominarán elementos oscuros y tenebrosos y, sobre todos ellos, una ineludible atmósfera dramática.
Titania abre definitivamente el disco con un tempo mucho más acelerado que el utilizado en el tema anterior. Goza de un estribillo pegadizo y de unos coros procedentes del inframundo que acaban acaparando todo el protagonismo de esta pesadilla musical, llegando a recordarme a los coros estudiados para las introducciones de las grandes tragedias griegas. Este temazo viene sucedido por Vater Der Vampire, que equivaldría a “El padre del vampiro” en español, en el que es un órgano, un instrumento más que relacionado con esta figura del folclore, quien nos da la bienvenida mientras la voz de Jason se vuelve más agónica a cada “Vater” que suplica (siempre que el coro se lo permite). Una clara e increíble interpretación de distintos personajes, por parte del mismo cantante en tan solo este track.
Wintertod llega a hacerse un poco repetitiva y cansina, el único elemento que brilla en toda la composición es la melodía del teclado que, de todos modos, no consigue salvar una canción que siempre me acaba pidiendo que pase a la siguiente, a ver si el compositor consigue sorprenderme. Y vaya si lo hace. David Jason consideró que el giro más dramático y adecuado para este momento del disco es una adaptación del trepidante In der Halle des Bergkönigs, una pieza clásica de Edvard Grieg que todos hemos escuchado en alguna ocasión y que, en este caso, goza del trasfondo tenebroso y salvaje que caracteriza el álbum.
Weltweit se inicia con una intro a teclado más propia de un disco de Stratovarius y que logra reenganchar al oyente. El coro vuelve a ser el encargado de narrar esta parte de la historia, con una melodía mucho más acertada que la que encontrábamos en Wintertod y que cede un breve espacio musical a los trabajados riffs de guitarra, que ya empezaba a echar de menos.
En Himmelwärts, las voces son mucho más claras y dulces, van acompañadas de una composición musical que no tiene nada que envidiar a cualquier buena banda de Power Metal. Una auténtica sorpresa que el artista ha decidido situar cerca del fin de un disco que prometía, en un principio, contener temas completamente distintos. Versuchung se mantiene exactamente en la misma línea aunque, en este caso, Jason acaba creando un estribillo que encajaría perfectamente en absolutamente cualquier disco de Rammstein de los últimos quince años. El juego que hace el músico al teclado, junto al dramatismo que aporta a las partes cantadas de Einmensch, logra este efecto distintivo que consigue transportarnos en otra dimensión en la que el Industrial y el Power Metal se encontraron.
Desde mi punto de vista, Abschield es el absoluto final, grandioso y espectacular, en el que nos reencontramos con los distintos personajes que han participado en este Imperium II y FINALMENTE puedo escuchar un (maldito) solo de guitarra en el que, por cierto, Jason se luce de nuevo como artista completo. Puntualizo de nuevo que, desde mi perspectiva, el disco tendría que haber concluido con el tema anterior, sin embargo, el compositor consideró necesario incorporar otra breve pieza en la que el oyente fuera capaz de distinguir cómo se cerraban las puertas de la torre, track que literalmente se ha llamado así: es schließen sich die Tore.
En definitiva, me ha sorprendido mucho más la capacidad artística de David Jason tema a tema que el disco en sí. Desde luego es un gran teclista y compositor, un chico con muchísimo talento y ganas de crear contenido. Un trabajo que se me ha hecho corto y me atrevo a decir que por momentos inmaduro. Aun así, si es una banda que ya has escuchado y te gusta, no te decepcionará, si no lo has hecho aún, te invito a descubrir lo nuevo de Schwarzer Engel.
7’25/10
Tracklist:
- Es Öffnen Sich Die Tore…
- Titania
- Vater Der Vampire
- Wintertod
- In Der Halle Des Bergkönigs
- Weltweit
- Himmelwärts
- Versuchung
- Einmensch
- Abschied
- …Es Schließen Sich Die Tore
Formación:
Voz, Guitarra, Batería, Orquesta – David Jason
Escrito por lachicamapache