S91 - Behold The Mankind (2016)

S91 - Behold The Mankind

“Irregular, pero con buena apariencia”

Crítica escrita por Moralabad

S91 nace en el año 2006 con el objetivo de convertirse en una banda de rock cristiano pero que, tras una serie de cambios de formación e influencias, finalmente se decantan por un metal progresivo con influencias del pop psicodélico, tal y como demostraron en su EP “Sto Per Tornare” y su primer disco de estudio “Volentà Legata”, ambos en 2009.

Tras tres años, deciden volver al estudio a componer nuevas canciones, con la ayuda del productor Cristiano Bertocchi (Wind Rose, Vision Divine, Labyrinth), pero no es hasta 2015 cuando se decidan a grabar, para que, el pasado 7 de noviembre finalmente lanzaran su segundo álbum de estudio, bajo el título “Behold The Mankind”.

El resultado de esos años de trabajo ha dado un fruto con mucho sabor a bandas del género progresivo clásico, como también a composiciones propias y, la verdad, muy variadas y técnicas. Quizá pecan en demasía de utilizar el mismo formato una y otra vez en sus canciones, por ejemplo, “Slaves And Kings” y “Blind Revolutions” son de esas que comienzan lentas, poco atractivas, pero según va avanzando el tiempo aparecen progresivamente elementos que llaman cada vez más la atención, finalizando los cortes con muy buena música. Esto es lo que, a mi parecer, hizo importantes a bandas como Porcupine Tree o Riverside, lo que quiere decir, que, si está bien y gusta, no es mal método.

También hay tiempo para temas con personalidad, como el caso de la inicial “The Cry Of Life”, aporta un grado de seriedad a su música y un punto a su favor en cuanto a calidad. “Sacrificed” es de esos que cada vez que lo escuchas, sus riffs de guitarra y batería te van enganchando cada vez más.

Por otro lado, también hay momentos para que la bonita y melódica voz de Mari muestre todo su potencial, protagonizando temas a modo de balada, como el caso de “Wandering Souls”, que, sin ser una composición sublime, aporta un grado alto de libertada a sus compositores.

En definitiva, es un disco con algún que otro altibajo musical, vocalmente bueno, con una producción digna del estilo, que, sin mostrar ningún atisbo de virtuosismo, gusta. La nota que le doy es un 6,6/10.