“Creencia regrabada”

Reseña de Christian Dárchez

Creo que no hace falta volver a escribir que es lo que pienso de las regrabaciones de discos clásicos, tanto que ni siquiera me dan ganas de buscar una de mis reseñas para hacer copy/paste, por lo que voy a tratar de ser lo más breve posible: para 1993 los ingleses oriundos de Halifax Paradise Lost venían de 3 discos a puro Death/Doom como lo fueron “Lost Paradise” (1990) “Gothic” (1991) y “Shades of god” (1992) que paradójicamente hicieron poco ruido tanto en la prensa como en el público. No hay que ser muy vivo para darse cuenta de que tanto Nick Holmes como Greg Mackintosh debieron replantearse un cambio de rumbo por si no querían seguir siendo ninguneados, y así nació “Icon”. A fines de septiembre se cumplieron 30 años de la edición de su disco bisagra (aunque no uno sumamente exitoso) y en lugar de reeditarlo la banda decidió que era buena idea regrabarlo. ¿El resultado? innecesario, pero tampoco llega a dañar el recuerdo de la grabación original.

“Icon”, cuarto disco de los ingleses Paradise Lost editado el 28 de septiembre de 1993, marcó un cambio radical en el sonido del grupo en el que dejaron de insistir con el Death/Doom e incorporaron la esencia de Rock Gótico (algo que habían avisado a cuenta gotas en “Shades of god”) a su propuesta metalera. Tanto así que se autoproclamaron “Los padres del metal gótico” pero Peter Steele se les adelantó un mes antes con la edición de “Bloody Kisses” de Type O Negative jejeje. En todo caso teníamos la entrada de corte sinfónica de Embers fire para luego entrar riffs mucho más limpios pero de machaques duros, bases rítmicas a medio tiempo y voces limpias que buscaban emular a lo hecho por James Hetfield de Metallica en “Black álbum” (1991) y lo lograba con creces seguido de Remembrance que continuaba en la línea medio tiempera del anterior pero con mucha presencia de triadas guitarreras, riffs que buscaban más el gancho en la cadencia melódica. La cosa se pone más movida y machacosa con la oscurita Forging sympathy mientras que con Joys of the emptyness bajamos al quinto subsuelo a pura pesadumbre melancólica. Dying freedom vuelve a levantar un poco más el ritmo con una estructura melódica que hacía pensar en una versión heavy de The Mission y la cambiante Widow que va desde los ritmos rápidos a los juegos rítmicos de toms.  Colossal rains sumerge al disco en una lluvia de machaques y fraseos oscuros y Weeping words es la que desconcierta ya que no se decide nunca que rumbo va a tomar: o si va a meterse en la miseria o a dar batalla. Poison es la prueba cabal de que Holmes y Mackintosh anduvieron dándose una panzada del “Black album”. True belief por su parte busca el gancho desde la oscuridad melancólica y el machaque y lo logran sin problemas. Shallows seasons y sus riffs eclécticos y gélidos parecieran anticipar la dirección que tomarían James Hetfield y los suyos 3 años después y para el final llegan la revisión noventera del rock gótico ochentoso de Christendom donde hasta incluyeron voces angelicales femeninas a lo Dead Can Dance y Deus Misereatur un instrumental oscurito con orquestaciones en clave gótica a modo de outro ideal para cerrar el disco. Pero Christian, ¡se supone que deberías hablar de la edición actual y no de la edición original de hace 30 años! Bueno, es que es lo mismo por más sonido actual que tenga jejeje

Sea como fuere “Icon” fue el disco con el que Paradise Lost le dijo tanto el público como a la prensa “Hey, estamos acá, ¡dennos bola!” y afortunadamente ambos respondieron bien, con buenas reseñas y ganando su buena base de fans. Se puede decir que “Icon” fue el disco bisagra para los ingleses y que luego le allanó el terreno para esa obra cumbre que fue, es y sigue siendo “Draconian times” (1995). Pero claro, esa es otra historia. En pocas palabras tal y como es se trata de una regrabación innecesaria pero que tampoco llega a dañar el recuerdo de la original como venía pasando con otras bandas (la regrabación de «Comalies» de Lacuna Coil me hizo sangrar los oídos). Ah y también les sirve para darles tiempo para trabajar en el sucesor de «Obsidian» jejeje

Paradise Lost

Nick Holmes: voz

Greg Mackintosh: guitarra

Aaron Aedy: guitarra

Steve Edmonson: bajo

Guido Zima Montanarini: batería

 

Canciones

Embers Fire

Remembrance

Forging Sympathy

Joys Of The Emptiness

Dying Freedom

Widow

Colossal Rains

Weeping Words

Poison

True Belief

Shallow Seasons

Christendom

Deus Misereatur

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