Opeth - Garden Of The Titans (Live At Red Rocks Amphitheatre) (2018)

«Embelleciendo el jardín con una grata selección»

Crítica realizada por ElyAngelOfDeath

Progressive Metal – Suecia

La banda sueca de Metal Progresivo viene con un nuevo trabajo debajo el brazo a manos del sello Nuclear Blast. Se trata del concierto grabado en los formatos DVD, Blu-Ray y vinilo durante la actuación que tuvo lugar el 11 de Mayo en el Red Rocks Amphitheatre de Denver (Colorado, Estados Unidos). Tanto los formatos de DVD y Blu-Ray, incluyen los CD’s de audio. Este trabajo salió el 2 de Octubre.

Este trabajo ya empieza fuerte con nada más ni nada menos que Sorceress, la canción homónima de su último disco que vio la luz en 2016. Si ya de por sí se trata de un tema intenso y atractivo por la cantidad de matices que se pueden escuchar en él, en vivo no se queda indiferente, dejando un buen sabor de boca, ya que los suecos rebosan todas sus influencias progresivas en este corte.

Con una introducción sosegada que rompe rápidamente en la faceta más fiera de la formación sueca arraigada a las raíces del Death Metal, hace su aparición Ghost Of Perdition, donde el público comienza a emocionarse cada vez más. Es una pista encantadora en todos los sentidos, desprendiendo una fuerte intensidad que te va atrapando poco a poco. La banda sigue tocando lo mejor de su cosecha, sonando esta vez Demon On The Fall, en la que continúan dando tralla por un tubo. Las cuerdas suenan desafiantes, acompañadas por la vigorosa batería de Martin Axenrot y en este caso, la cruda voz de Mikael Akerfeldt, transportándonos a esa época más oscura de Opeth.

La banda nos deleita con la fluidez de los sonidos de The Wilde Flowers, un tema que marcó mucho a su disco «Sorceress«, en el que los suecos experimentan con todas las sonoridades que le son posibles y que, con un público acalorado por la emoción, sigue dando de qué hablar. Me parece un corte bastante acertado para el directo. Su trabajo «Damnation» de 2003, también se encuentra presente con In My Time Of Need, de sonoridad calmada cuyo brío es increíble. La formación sueca nos deja coger un poco de aire con esta pista.

The Devil´s Orchad, llega como un soplo de aire fresco donde Opeth nos vuelven a introducir de lleno en las corrientes progresivas. Sin duda alguna, saben como «jugar» con las emociones de su concurrencia, siendo éste el claro ejemplo de ello. Las imponentes guitarras de Mikael y Fredrik ponen la carne en el asador en esta intensa canción. La banda no pudo dejarse en el tintero a Cusp Of Eternity, de su álbum «Pale Communion» (2014). La energía y la pasión corren a cuenta nuevamente de un M. Akerfeldt muy entregado a su público; de hecho, despliega todo el potencial de su voz con fuerza.

Un instrumental muy robusto, abre sin tapujos Heir Apparent, en el que la asistencia se encuentra cada vez más excitada por el potencial de los suecos. Toda una bomba de relojería en directo, donde nuevamente, volvemos a la parte más oscura y rompedora de Opeth. Llegando casi al final del show, comienza a sonar Era, de inicio sosegado y que de repente quiebra en una energía indomable. Me parece muy acertado este tema para llegar al final con Deliverance, de potentes instrumentos en los que cabe destacar especialmente a la batería. Con su juego de diversos sonidos y cambios de ritmos, es un final que despide a la banda sueca por todo lo alto dejando a su público con un grato entusiasmo.

De este nuevo trabajo de Opeth me ha encantado sobretodo, la diversidad de sus temas, creando así un buen repaso de su enérgica carrera musical. Un espectáculo para disfrutarlo a través de todos los sentidos.