Mystic Prophecy – War Brigade (2016)

“Recompensa sin riesgo”

Crítica escrita por Luishard

Amigos de Dioses del Metal, cuanta crítica subliminal esconde la frase que intenta resumir las sensaciones que te envuelven al escuchar el noveno disco de los alemanes Mystic Prophecy. “Recompensa” porque el álbum en sí tiene sus buenos momentos y “sin riesgo” porque estos llevan años ofreciendo el mismo sonido básico sin salirse un ápice de la senda, Power Heavy Metal pesado. Así que cuando cogí War Brigade para comentarlo sabía desde el principio lo que me iba a encontrar.

Este disco salió editado el 18 de marzo por Massacre Records y la banda lo presentará en directo en marzo y abril en su gira con Orden Ogan y Manimal. Sinceramente lo más llamativo es la portada, obra de Uwe Jarling, un portadón que entra a sangre y fuego por la retina, dinámica e incendiaria, se me van los ojos tras ella. Bueno, el sonido tampoco está mal, todo lo contrario, producción enérgica e intensa. Ha sido grabado en Prophecy & Music Factory Studios con el productor Roberto Dimitri Liapakis. Fredrik Nordström (Hammerfall, In Flames, Arch Enemy), con el que repiten por sexta vez, se ha encargado de la mezcla en Studio Fredman (Suecia).

Soy un fans de las lentejas, no me importaría comerlas a diario, con añadidos y buen aceite van cambiando ligeramente el sabor pero sé “de que van” y Mystic Prophecy son aquí cocineros de la misma receta con leves aportaciones distintivas. No hay ninguna pista que prevalezca, digamos que todas son medio buenas. Un aspecto muy destacable es la voz de Liapakis, rasposa y con poderío, llevando en volandas las canciones.

Son 12 temas y algo más de 48 minutos donde predominan los medios tiempos, alternando secciones melódicas con otras más cañeras, muy bueno los efectos de los coros, que en directo deben funcionar de forma espectacular, exhibiendo un buen repertorio de riffs plomizos y solos en abundancia. ¿Pegas?, todo predecible aun cuando el vocalista hace intentos de cambiar sus registros hacia gritos Death, en plan Metal moderno en el inicio de algún corte pero son gotas en el desierto.

Curioso el bonus track, una versión de Tom Jones de Sex Bomb, pasar de contar historias sobre la guerra, la muerte y el diablo a algo tan jocoso debe ser irrisorio para R.D, pero no queda mal en plan Heavy Metal aunque como cierre de disco no me convence.

Veamos como de agresiva es esta “Brigada de Guerra”. Follow The Blind abre sin concesiones mezclando caña y riff melódico, el ambiente es demoledor pero cuando llega el estribillo languidece y pierde, lástima. Metal Brigade es más densa y oscura que la anterior, como les gusta a estos los riffeos llenos de melodía, ahí van bien, pero otra vez cometen “el fallo” de empalagar en demasía el estribillo, es un empache de “merengue”.

Burning Out explora otras zonas de guerra con ese riff tan demoledor y grito gutural de Liapakis, además el ritmo es acelerado en plan thrasher y le da mucha prestancia al corte, hay más pelotas puestas encima de la mesa, bien!!!. Y en contraposición llega el feeling de The Crucifix, mucho más clásica y ochentera, en exceso diría, pero con grandes momentos. Pray To Hell tiene unos arreglos de inicio inquietantes y tenebrosos, la instrumentación arriba oscura y plúmbea, tanto que cuando salta me parece más Death que otra cosa, luego deriva hacia lo ya oído pero con rabia.

Del resto de canciones señalar la excelsa melodía tan retro de 10,000 Miles Away, Good Day To Die y sus instantes tan guerreros con esos gritos espartanos, el torrente de riffs tan pegadizos de The Devil Is Back, War Panzer y su cadencia quiebra cervicales, Fight For One Nation y sus jugueteos con el Hardcore y por último, los momentos tribales tan envolventes de War Of Lie, con otro punteo de escándalo.

War Brigade no decepciona si sabes a lo que vas, sin riesgo pero bien hecho, es lo que los fans de toda la vida le piden a Mystic Prophecy, que han sacado un trabajo notable sin desmelenarse, así que la media de mis variables a valorar en este estilo sale de 7,5 puntos sobre diez. Un saludo metálico a todos.