“Me quedo con la parte buena: las bandas”
Crónica escrita por ElyAngelOfDeath
El pasado 26 de Agosto (viernes), tuvo lugar en la localidad jienense de Linares este pequeño “festival” al que se le dio el nombre de La Noche de las Leyendas del Rock, un nombre más que merecido, ya que se subieron al escenario nada más ni nada menos que Obús, Medina Azahara, Reincidentes y la banda de la localidad, Automatics.
Antes de entrar a hablar de las bandas que tocaron esa noche, me gustaría decir que la organización fue lamentable. Es increíble decir que este concierto esté realizado por una empresa dedicada y especializada en organizar eventos musicales. No quiero entrar en múltiples detalles, pero sí decir que los empleados de dicha empresa creo que no han conocido el respeto hacia las personas, eso queda especialmente reflejado en las palabras malsonantes empleadas y además dichas en tono más que desagradable. También quiero comentar que a la prensa no se nos dio ningún tipo de acreditación y que el personal de seguridad tenía que jugar al “quién es quién”, teniéndose que aprender el aspecto de cada uno (del personal de prensa), para acceder al foso y poder hacer las fotos. Pero la gracia del chiste se encuentra en que los amigos/familiares de los empleados sí que llevaban una pegatina identificativa para poder pasearse por allí tan a la fresca y estar con las bandas; otra cosa que se nos prohibió sólo a algunas personas de prensa ya que supuestamente “no lo permitían los representantes de las bandas”. En definitiva, me pareció penoso que se le “pasara la bola” a los representantes como excusa para imponer un montón de leyes a la prensa esa noche y que no se nos permitiera en algunos casos hacer un trabajo correcto y satisfactorio, o por lo menos así fue en mi caso.
Otro caso que dejó en descontento a la mayoría de los asistentes, fue el precio de la entrada, ya que en todos los medios indicaba un precio y luego resultó que costaba más de lo indicado, tanto si se compraba por adelantado como en taquilla (15€ era el precio igualitario tanto comprada con anterioridad como en taquilla, cuando realmente el coste era de 17€ por adelantado y 20€ en taquilla); además de un precio desmesurado en la barra que se puso en el recinto para comprar bebida y comida.
Bien, pues el evento abrió con Automatics, la local. Era la primera vez que los veía en directo y sabía de antemano que no era una banda que se caracterizase especialmente por su dinamismo sobre el escenario. Efectivamente, la falta de agilidad hizo que el concierto se hiciera un poco pesado en algunos momentos. Su música no me disgusta especialmente, pero si que me quedé con ganas de ver algo más en la puesta en escena. Eso sí, considero que el sonido fue muy bueno y el juego de luces fue también muy acertado para el tipo de música que tocan.
Los asistentes empezaron a agitarse y a impacientarse cuando Automatics se bajaron del escenario; la emoción empezaba a surgir de forma desbordante porque esta vez cogían el relevo Obús.
La banda liderada por Fortu Sánchez dieron esa noche un SEÑOR BOLAZO con todas las letras y en mayúscula porque fue un concierto de 10. Fortu sabe de sobra meterse al público en el bolsillo y efectivamente, fue lo que hizo con sólo poner un pie en escena.
La exaltación del público era cada vez mayor con cada tema.
La agitación aumentó cuando sonó Te Visitará La Muerte, un corte que por supuesto no podía faltar, donde al final Fortu le hizo un corte de manga a la Muerte y dio paso al cañero Que Te Jodan.
La banda jugó con el público en muchas ocasiones donde y lo pasamos genial; hasta Fortu hizo el pino casi al final cuando se estaba presentando la banda y el batería tocó con sus baquetas una escalera metálica. Fue increíble porque vi muchas facetas del vocalista; desde algunos gestos obscenos hasta su aspecto más entrañable cuando subió al escenario a unos niños con toda la esencia y el carisma que tanto le identifican.
Otras pistas míticas de Obús que tampoco faltaron fueron Dinero, Dinero o Corre Mamón. Hasta que se despidieron con la inigualable Vamos Muy Bien.
Con este enorme concierto Obús demostraron esa noche por qué son una de las grandes leyendas del Heavy Metal nacional. Fue increíble.
Tras Obús, subía al escenario otro de los platos fuertes de esa noche, que no era nada más ni nada menos que la banda cordobesa Medina Azahara. Si antes el público estaba exaltado, en esos momentos lo estaba más aún.
Canciones que fueron imprescindibles esa noche: Hay Un Lugar, Paseando Por La Mezquita donde Paco Ventura demostró con creces por qué es de los mejores guitarristas de este país; otra canción que no faltó fue la inigualable Córdoba, siempre interpretada con un cariño y una dulzura especial y donde a Manuel Martínez siempre se le iluminan los ojos cuando la canta. No Quiero Pensar En Ese Amor fue otro tema incluido en el track list además del homenaje a Triana con El Lago, cantado a viva voz por todos los asistentes. Y para acabar ese mágico momento con los cordobeses, que mejor forma que hacerlo con el espléndido Todo Tiene Su Fin, el corte mítico de Medina Azahara.
La última banda en salir fue Reincidentes, que esa misma tarde ya dieron un concierto en acústico en un pub de la localidad en honor y por la libertad Andrés Bódalo.
Por la noche, comenzaron de forma increíble donde el público que esperaba a la banda desde el comienzo del evento vivieron como nunca cada uno de los temas que tocaron con una energía monumental, donde conceptos como la Libertad y en general, las letras revolucionarias de Reincidentes, no cesaron de sonar en esa fantástica noche.