¨Jodiendo a Jodo¨

Por Christian Darchez

 Calificación: 8/10. Género: documental.

¿Conocen al director de origen chileno Alejandro Jodorowsky? sino les voy contando que fue prácticamente el precursor del cine surrealista, de una visión muy particular y retorcida sobre el arte cinematográfico y un autentico transgresor junto con Andrzej Zulawski (que se nos fue recientemente). Sentaron las bases de cómo hacer cine e impactar al mismo tiempo mediante la provocación y los excesos. Bueno Jodo, tal cual es conocido cariñosamente, fue el creador de verdaderos escándalos maravillosos del celuloide como Fando y Lis (1967) el genial Spaghetti Western lisérgico El topo (1970),  La montaña sagrada (1972) el cual solo James Bond fue capaz de hacerle frente y fue considerada para muchos artistas como Ringo Starr o John Lennon como ¨la biblia del LSD¨, con esto se darán cuenta lo bizarro que eran los ex miembros de The Beatles. Hasta llegar a, para muchos, su obra cumbre: el film de terror psicológico Santa sangre (1989), que si bien es más accesible y menos volada de su filmografía, resumen muy bien las cualidades de este particular director. Mucho tiempo estuvo retirado y había creado entre otras cosas la psicomagia (una forma de tarot creada por é y basado en cosas de corte sexual o algo así) como también muy versado en ciencias y literatura.

Si hay alguien con quien me gustaría compartir un café o unas cervezas y debatir no seria con ningún músico de Rock o Metal, sino con Alejandro Jodorowki. Ese sí sería un duelo digno de contarse como una epopeya épica.

Ahora que en este nuevo milenio ha regresado con La danza de la realidad (2012) que aÚn no he tenido la suerte de visionar; hace muy poco me hice con este soberbio documental. Por si no lo sabían, en 1975 el gran Jodo estuvo a punto de llevar a la pantalla grande el clasicazo de ciencia ficción del autor Frank Herbert Dune. Jodorowky’s dune narra las peripecias y el ¨no¨ de los grandes productores de la época para dejar a la película como ¨la mejor película de ciencia ficción que nunca se llego a filmar¨. Mediante testimonios del mismo Jodo como de directores y críticos de la época nos sumergen de lleno en las peripecias y convocatorias que Jodo llegó a reunir para su particular visión de la obra de Herbert.

Es impresionante ver los bocetos que el gran artista de comics Jean ¨Moebius¨ Giraud creo a través de los deseos de Jodo y darnos la pauta de lo que Jodo quería para su película. Hasta Pink Floyd y Magma habían sido convocados para musicalizar el film!!!!. O los diseños de las naves espaciales que había creado H R Giger (responsable de Alien) pergeño producto de la genial y extrañísima mente del director. Ver a Orson Welles interpretando a uno de los personajes más fuertes de la trama (al mismísimo Vladimir Harkonen) o las lisérgica secuencias de los viajes astrales producto de la especia melange (el factor desencadenante en Dune que Jodo hubiera superado en La montaña en materia de surrealismo). Y además, hubiese contado con la colaboración de John Dyktra para los efectos visuales de la misma y Star Wars quedaría como un peldaño más en su ilustre carrera.

El mayor inconveniente del asunto es que más allá del tremendo equipo que reunió para la misma, justamente el ego fue la perdición de Alejandro Jodorowky. Con todo el dolor de mundo debo decir es que Dune hubiera sido un espectáculo visual único pero Jodo habría distorsionado la obra de Frank Herbert; más para casi el último acto. Más allá de que el cine de Jodo se comporte de manera deslineal, el desenlace no habría tenido el más mínimo sentido ya que su propio hijo (que habría interpretado a Paul Atreides, el héroe y lider de la resistencia en Dune) fue entrenado en artes marciales como karate y tae kwon do y técnicas de espada como el kendo y el iaijutsu. Haber sido asesinado de manera tan boluda como Jodo quería plantear para darle un sentido simbólico a la peli (cosa que el libro no lo necesita por que está lleno de ellos) se habría perdido por completo la visión de Herbert sobre la liberación espiritual y terrenal que atraviesa el planeta Arrakis y no hay que olvidar que Dune, más allá de la complejidad del mismo, no deja de ser una propuesta de ciencia ficción y acción.

Por aquellos años Dune era un libro muy conocido y se conseguía en cualquier librería y en parte se entiende del por que los grandes estudios le dieron la espalda al proyecto de Jodo; el público hubiese querido ver la obra de Herbert como él la concibió y seguro los productores previeron que sería un horror para todos ver morir al implacable Paul Atreides degollado por la espalda. El ¨no¨ a Jodorowky fue rotundo, algo que hirió el gran orgullo del transgresor realizador chileno.

Los mismos problemas los sufrió David Lynch (gran discípulo de la escuela de Jodorowky) en 1984 cuando se encargo finalmente de llevar Dune a la pantalla grande donde si bien se respetó bastante el libro (o lo más que se pudo), se vio afectado con el desastroso casting de la misma con actores que no dieron la talla (ver a Sting interpretar a Feyd Harkonen fue lo mismo que ver a Justin Bieber como villano en alguna de James Bond), además del recorte de metraje que los productores le obligaron a hacer (podía haber sido tranquilamente una trilogía). Hasta el día de hoy Lynch sigue odiando la película.

Todo el documental para Jodorowsky lo cuenta con una pasión y amargura que te sumerge de lleno en su visión y las anécdotas que surgieron hasta el desprecio que sintió cuando Dune fue llevado al cine y no por él. Hollywood aun tiene una deuda muy grande con la obra de Frank Herbert. Si los documentales no son lo tuyo, dudo que Jodorowsky’s dune te despierte algún entusiasmo pero para los fans del gran realizador chileno y de los documentales en sí, Jodorowsky’s dune merece sí o sí su visión.

 

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