«Un trabajo más que aceptable de los suecos»
Crítica escrita por Sikanda
Suecia – Power Metal
Es un lanzamiento de agosto de este año, pero Hammerfall, esta banda sueca de heavy-power metal creada en 1993, se merece estar de actualidad en cualquier momento por su dilatada trayectoria. El presente disco, “Dominion” hace el número 15 de su carrera, el undécimo de estudio. Han tenido altibajos, parones y todas las peripecias habituales en los grupos que llevan tantos años funcionando juntos. Pero se han repuesto a todo para ofrecer un disco solvente, potente, fiel a su estilo que gustará tanto a los seguidores de la formación como a los que lleguen a ella ahora. Cierto es también que, no todos los temas que conforman el cd, tienen la misma calidad o que algunos quedan algo por debajo de los que componían aquellos maravillosos discos como “Glory to the brave” o “Legacy of kings, pero este “Dominion” es un digno sucesor.
Se inicia con «Never Forgive, Never Forget» un corte muy potente, veloz, con un gran trabajo vocal de Joacin Cans, que nos hace presagiar un buen disco, pero que luego, como dije anteriormente, tiene algunos cortes menos interesantes. El siguiente es el que titula el álbum, “Dominion”, más pesado, con las guitarras más sucias, una batería poderosa y tintes más rockeros en general. Algo más oscuro aparece el siguiente, “Testify” que recupera velocidad y limpieza en la guitarra en el solo. En esa misma línea aparece también “One against the world”.
Toda una declaración de intenciones o un manifiesto de lo que llevan haciendo ya más de 25 años es el siguiente sencillo: «(We Make) Sweden Rock», una autoexaltación a su música, a su país y a su propio estilo, un tema muy de directo. Le llega después el turno a la balada, o al corte lento del disco: “Second to one”. Muy del estilo de otras anteriores, iniciándose solo con la voz y el piano. La voz resulta algo más grave que en el resto del disco, sin que le reste belleza y es que los suecos siempre se han manejado bien en estos campos.
Con gran protagonismo para la batería de David Wallin y los coros tan característicos de la banda llega “Scars of a generation” de claro estilo power metal. Después llegamos, en mi opinión, a esa zona menos vistosa o llamativa del disco, o menos original, más repetitiva que forman las canciones “Dead by dawn”, la intro “Battleworn”, “Bloodline” y “Chain of command”. Por lo que sea, no me llegan como el resto de temas, sin ser malos cortes.
Para cerrar el disco, suena “And yet I smile” que comienza más lenta en el principio, con un toque casi eclesiástico. Después entran los instrumentos a saco y va alternando los ritmos para conformar un medio tiempo, también se les dan muy bien, con una bonita melodía de la guitarra de Oscar Dronjak. Destaca enormemente la aguda voz de Joacin Cams, que hace alarde de todo su poderío vocal en una canción esperanzadora. Quizás hubiera estado mejor elegir algo más cañero para terminar y dejarnos con ganas de más, pero el tema está entre los más elaborados del cd.
Hammerfall
Oscar Dronjak / Guitarra
Fredrik Larsson / Bajo
Joacim Cans / Voz
Pontus Norgren / Guitarra
David Wallin / Batería
Canciones
Never Forgive, Never Forget
Dominion
Testify
One Against the World
(We Make) Sweden Rock
Second to One
Scars of a Generation
Dead by Dawn
Battleworn
Bloodline
Chain of Command
And Yet I Smile