“Entre lo clásico y el extremo”
Crítica escrita por Moralabad
Suecia – Progressive Metal
Segundo disco de estudio de los suecos Gigafauna, nativos de Uppsala, practicantes de un metal progresivo de corte entre clásico y extremo. Aunque en otros sitios web los califican como sludge, tampoco estaría mal, aunque en ciertos temas no hay este tipo de parecido. La verdad es que información de la banda no es que haya poca, hay lo mínimo y todo lo puedes encontrar aquí, ni siquiera en la gacetilla de prensa del disco viene más.
Debutaron el pasado año con un disco corto, “Vol. 1”, de algo más de media hora y ahora vuelven con algo mucho más elaborado, buenos pasajes de guitarra, elementos más predominantes. La voz puede recordar a sus compatriotas Evergrey, no por el tono sino por la forma, melancólica y sentida como ninguna que, junto a los ritmos pesados y complejos hacen que su tema inicial, “Frozen Wastes”, homónimo al disco y de casi cinco intensos minutos, describan perfectamente lo que ofrece la banda. Ya que no hay información escrita, que sea nuestro oído el que decida qué información quiere obtener.
El segundo corte, “Kaiju” sí que puede contener esos aires a lo stoner/sludge que le aporta la “pesadez” de los ritmos de guitarra y bajo. Este tema también son diez minutos en los que la voz principal aporta cierto aire de misterio sobre el que pesa un ambiente de incertidumbre en la historia lírica. Es una canción con muy buena instrumentación y originalidad. “Luminous” y “Solid Fuel Is Dead” son más rápidos en sus primeras estrofas para luego asentarse en algo más calmado. De estructuras similares, varía la letra y parte de guitarra solista, en esencia, muy parecidas. Con “Future Null Infinity” vamos a recordar partes de otras bandas anteriores, seguramente sea el corte con mayor peso de sus influencias, Evergrey, Dream Theater y, quizá no tanto, pero se nota que el rock tradicional a lo Black Sabbath, Pink Floyd, Genesis, King Crimson, también aflora para tener su hueco. Esto se nota con más claridad en el sonido de la voz junto al trabajo de guitarra, claramente fantástico. Una gran canción que me ha sorprendido.
Terminando el disco tenemos los dos cortes “Orbital Motion” y “Night’s Retreat”. Parecidas en tiempo, pero alejadas en idea. La primera es muy rara, la guitarra y batería van por una parte y la voz por otro, da mucha sensación de querer hacer algo al estilo Tool, pero sinceramente pienso que han patinado severamente. En el segundo caso, finalizando con otros ocho minutos, mucho más oscura, cercana al doom más extremo, destaca el aspecto vocal mientras desarrolla de forma melancólica junto a riffs de guitarra demasiado repetidos.
En general, un disco variado, que aporta frescura al género progresivo y, que, a su vez, sigue en sus trece de crear temas con influencias clásicas. La producción no es mala, hay que decir que es un disco autoproducido y publicado de forma totalmente independiente. Eso sí, es de los que cuesta entender a la primera, pero de los que gustan con más audiciones. Merece darle una oportunidad, para ello, puedes escucharlo al completo en el vídeo de abajo.
Nota: 6,8/10.
Canciones
1. Frozen Wastes
2. Kaiju
3. Luminous
4. Solid Fuel Is Dead
5. Future Null Infinity
6. Orbital Motion
7. Night’s Retreat
Gigafauna
Kristian Bäckbrant – Bajo
Rickard Engstrom – Batería
Arvid Nyden – Guitarra
Matt Greig – Guitarra y voz