“Buen sentido instrumental”

Crítica escrita por Moralabad

Noruega – Art/Atmospheric Rock

Desde las montañosas tierras del norte europeo, más concretamente en Noruega, llega el nuevo disco de Gazpacho, los genios del rock ambiental y atmosférico con el que parecen estar componiendo una obra de arte cada vez que se meten al estudio. Cinco nuevos cortes en cincuenta minutos, solo que las canciones de los extremos superan los quince. Su tranquilidad siempre les a proporcionado un toque muy personal en cuanto a instrumentación, pocas bandas cuentan tanto con, aparentemente, tan poco.

Sin duda es una música para escuchar y deleitarse con el uso de auriculares, con altavoces se disfruta, pero con los primeros se siente más profunda. Los teclados y violín le aportan un mayor trasfondo a la voz, que resulta ser su elemento más completo. La base rítmica se centra en un ritmo prácticamente plano de batería y bajo siguiendo al bombo, todo ello con una guitarra que alterna bastante el sonido, centrando la armonía en la voz y teclados.

El primer corte, “Space Cowboy”, de casi veinte minutos contiene todo lo descrito en el párrafo anterior, a pesar de ser un tema largo, no se hace pesado ya que la variación técnica les permite enfocarse en registros distintos en cada pausa. En realidad, se trata de cinco secciones con títulos independientes que juntas crean esa larga canción. Como su nombre indica, también se pueden notar líneas de teclado a lo rock espacial, sobre todo de la rama de los 70-80. Después le siguen tres pistas cortas, “Hourglass”, que puede resultar la favorita de mucho público debido a su ambiente evocador de piano al que se le suma una buena sección de estribillo coreado que recuerda a Porcupine Tree.

En el caso de la homónima, será la que mejor defina el trabajo y aparición de la batería, permitiendo que sobresalga más y aporte mayor repertorio que en el resto de temas. “Antique”, por su parte, centra sus esfuerzos en mostrar una faceta más oscura de su vocalista, obteniendo como resultado un corte mucho más sólido que los largos, todo está más comprimido, lo cual le aporta mayor fuerza y ataque sonoro.

Finalmente, los quince minutos y algo de “Sapiens”, que se divide en dos partes, saca el lado más agresivo de la banda, llegando la guitarra a mostrar sus garras con una distorsión fuerte y garajera. En la segunda sección se centran más en un rock ambiental muy en la línea de los islandeses Low Roar, con el claro parecido de la voz y los teclados.

En definitiva, es un disco muy apetecible. Después de veinte años de trayectoria discográfica el sexteto noruego sigue en forma, demostrando que con una música tranquila también se puede llegar a la gente. Buena producción y sonido final.

Nota: 8/10.

Canciones

1. Space Cowboy

2. Hourglass

3. Fireworker

4. Antique

5. Sapiens

Gazpacho

Jan-Henrik Ohme – Voz

Jon-Arne Vilbo – Guitarra

Thomas Andersen – Teclados

Mikael Kromer – Violín

Kristian Torp – Bajo

Robert R Johansen – Batería

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