Frozen Soul - Glacial Domination (2023)

“Un glaciar de muerte”

Crítica realizada por ElyAngelOfDeath

Death Metal – Estados Unidos

Los texanos Frozen Soul, están de vuelta este año con su segundo trabajo de larga duración. Lleva por nombre “Glacial Domination”, y fue lanzado el pasado 19 de Mayo, a través del sello discográfico Century Media Records.

El plástico, comienza con Invisible Tormentor, que a pesar de su inicio tan enigmático y sosegado, en seguida, nos lleva por los acometedores sonidos de un Death Metal de corte clásico, donde los pilares fundamentales de este género musical, se encuentran muy bien asentados. La formación, se decanta por un constante cambio en los ritmos, que aporta bastante dinamismo; pero nos conquistan sobretodo con esos fragmentos donde los ritmos son frenéticos y el instrumental ensordecedor, en especial, las guitarras. Como no podía ser de otra forma, la guinda al pastel la pone un ensordecedor gutural. Le sigue Arsenal Of War, donde mantienen la mayoría de elementos sonoros que en el corte anterior. Aunque vislumbraremos como la voz, se posiciona por encima del instrumental y lidera a todo el conjunto de manera soberana. Death Metal de calidad es el que trae la agrupación norteamericana en tan sólo dos pistas. Mientras que en Death And Glory, la potencia sube como la espuma. A pesar de que Frozen Soul, se mantienen en la misma línea, esta vez podemos apreciar una compenetración excelente por parte de los instrumentos, que se encargan de dominar toda la composición desde el principio hasta el final. Suenan con una belicosidad y una fuerza sublimes, mientras que el gutural, ayuda a reforzar aún más al tema y a arrojar esa oscuridad también propia de este género de Metal. En Morbid Effigy, nos encontramos con la primera colaboración del álbum. En este caso, es John Gallager de Dying Fetus, el que une sus fuerzas junto a la banda estadounidense. Es un corte que cuenta con una ambientación misteriosa a la par que llamativa al principio, que nos lleva hacia una sonoridad de ritmos pausados pero de una pesadez colosal. Podemos apreciar, como la formación, llevan su sonido un paso más allá y rozan los límites de un Death Metal de carácter más extremo. Lo cierto, es que ya apetecía encontrar algo más de variedad en sus composiciones, aunque su Death de antaño cuente con una calidad exquisita y una ejecución impecable. En la misma línea suena Atomic Winter, que se encarga de finalizar el plástico de manera soberana.

Annihilation, es una canción instrumental de duración muy breve, que nos lleva de la mano hacia el tema homónimo, Glacial Domination, donde esta vez es Matthew K. Heafy (Trivium), el que colabora en este corte de Frozen Soul. Estamos ante una composición de instrumental muy rugiente y repleto de brío, donde las cuerdas suenan de sobresaliente. Mientras que la batería y el gutural ayudan a fortalecer aún más a la canción, sobretodo las cuerdas vocales del frontman con ese toque tan crudo. En definitiva, es un corte donde todos los elementos funcionan muy bien desde el primer segundo sin ninguna fisura. Seguiremos disfrutando del líder de Trivium también en Abominable. Continuamos con Frozen Soul, que es la pista homónima de los norteamericanos. En ella, vuelven a las andadas a través de esa intro tan interesante, que después nos sumerge de lleno en las corrientes más clásicas del Death Metal. El frontman, situado en un primer plano durante toda la canción, lidera al resto de integrantes a través de su rudo gutural marca de la casa. De hecho, el poder que desprende es interesante. Aunque, las guitarras, llevadas a cabo por Michael Munday y Chris Bonner, también suenan potentes y vigorosas en todo momento. Llega el turno de Assimilator, un tema que destaca porque la banda vuelve a subir los decibelios. La belicosidad, inunda cada una de las notas de esta composición, del mismo modo, que también lo hace la auténtica personalidad de la banda. A pesar de apreciar melodías que cuentan con esas influencias clásicas de Death, esta vez la formación se encarga de aportarles unos tintes más contemporáneos. Es un tema bastante acertado desde la primera hasta la última nota. En el noveno lugar, podemos escuchar a Best Served Cold, el que considero que es el corte más salvaje del nuevo larga duración de Frozen Soul. En él, la agrupación estadounidense no duda ni un solo segundo en poner toda la carne en el asador, mostrando así, toda esa fiereza y una faceta más salvaje, que lo cierto es que les queda muy bien. En algunos instantes, introducen algunos tintes de un Death más estremecedor, que complementa muy bien al resto de la pista. En cuanto al frontman, no solo nos muestra un gutural más desgarrador, sino que continúa mostrando sus grandes dotes de liderazgo.

Frozen Soul, están de vuelta con un disco bastante correcto, en el que todos los ingredientes funcionan y se compenetran bien en todas las canciones de este nuevo trabajo. A veces puede parecer un poco monótono pero saben defender de manera grata esas corrientes más clásicas del Death Metal.