Crematory - Oblivion (2018) | Dioses del Metal

«El año dorado de la música de Crematory ha llegado»

Crítica realizada por ElyAngelOfDeath

Gothic/Indutrial Metal – Alemania

El año pasado, la banda alemana ya nos deleitaba con un magnífico CD + DVD que incluía el directo que dieron en el prestigioso festival alemán Bang Your Head en el que también contenía los videoclips de su anterior disco, «Monument» de 2016. Este año han vuelto con el que es su nuevo trabajo de estudio que lleva por nombre «Oblivion«, salió a la luz el 13 de Abril.

El plástico comienza con Expectation a modo de intro introduciéndonos en seguida en la siguiente pista, Salvation, uno de los adelantos que ya mostraron los alemanes haciéndonos la boca agua con lo que iba a ser este nuevo álbum. La banda sigue plasmando su esencia impregnada por una estela oscura que tanto la caracteriza. Es una delicia el estribillo por la voz tan melódica que contrarresta a la gutural que la escucharemos durante el resto de la canción. Es un gran primer contacto con «Oblivion«.

En Ghost Of The Part, Crematory empiezan a introducir enormes influencias de Industrial Metal llevadas a cabo por unos laboriosos teclados a manos de Katrin. La cuidada combinación de teclados y voz gutural es el punto fuerte de este tema. Una ambientación orquestal de sonoridad muy pulcra nos recibe en Until The Dawn para después llevarnos prácticamente de la mano hasta la voz de Felix creando de nuevo una perfecta armonía junto a la de Tosse y sus tonos melódicos e intensos.

Con una exquisita y sosegada melodía de piano suena Revenge Is Mine, para pronto romper en un instrumental enérgico y potente que lo da todo especialmente en el estribillo, donde la intensidad sube de manera desmesurada siendo la parte donde todos los miembros de Crematory se dejan hasta la piel. Es de los cortes en los que mejor muestran su personalidad. La influencia de Industrial Metal cada vez se hace más fuerte, siendo Wrong Inside una magnífica muestra de ello, compaginándose bastante bien con la naturaleza sombría que tanto identifica a los alemanes.

Crematory sacan su lado más «amable» para traernos la intensa Stay With Me, la balada del plástico, que cuenta con una sonoridad melódica desde el principio a la que no le falta ni una pizca de pasión para seguir la línea tan penetrante del álbum. Es una de las joyas más resplandecientes de «Oblivion«. For All Of Us, es todo lo contrario, siendo quizás de las pistas más fieras de todo el disco. Aunque la banda mantiene la parte agresiva frente a un estribillo melodioso y de gran magnitud, esta vez la energía que desprende es más que arrasadora, en parte, por la combatividad de las cuerdas.

Llegamos hasta Immortal, para mí es de mis favoritas porque desprende Industrial Metal en cada parte de la canción. Crematory se enredan por completo en los derroteros de este género tan particular impregnándose de él por completo, cuyo resultado no defrauda en absoluto. Es una auténtica maravilla. La intensidad sigue subiendo en el tema homónimo, Oblivion, que se envuelve en una atmósfera tenebrosa y misteriosa donde la banda prosigue excitada dentro de los confines del Industrial pero, esta vez, con la voz gutural de Felix llevándose la palma por su trabajo magistral.

Una batería potente es la que abre Cemetery Stillness, a la que se le acopla muy bien Katrin con los teclados y las dos voces llegando a tonos bastante altos. En la misma línea suena además, Blessed, donde los alemanes mantienen sus sonidos repletos de teclados, cuerdas y batería cautivadoras y dos voces opuestas que ponen la guinda al pastel.

Cerrando el plástico se encuentra Demon Inside, que rompe todos los esquema de «Oblivion» siendo un tema rebosante de fiereza y agresividad desde el principio. La banda vuelve a su estilo lleno de oscuridad recordando incluso a sus trabajos anteriores. Es un contraste demasiado fuerte pero que no deja un mal sabor de boca.

Crematory es una banda que sigue «experimentando» con su propio sonido y lo consiguen. Siempre se puede encontrar algo distinto en cada uno de sus discos y, por supuesto, «Oblivion» no iba a ser una excepción.