“Identidad progreta muy bien salvaguardada”
Reseña de Christian Dárchez
Después del inmenso “Shrines new generation slaves” (2013) me costó muchísimo conectarme con los polacos progresivos Riverside, por lo que tampoco comulgué con la prensa especializada en eso de que los discos siguientes “Love, fear and the time machine” (2015) y “Wasteland” (2018) eran obras maestras inmaculadas. Es que al menos en mi opinión “Love, fear and the time machine” no tenía un rumbo definido: solamente se pusieron a experimentar con otros sonidos con el fin de justificar una búsqueda que no tenía finalidad alguna y en “Wasteland” los escuché abatidos, apesadumbrados y bastante fríos como si la pérdida del guitarrista Piotr Grudkinski (fallecido en 2016) aun les doliera pero sin poder convertir ese dolor en algo positivo. Un lustro después de su ultima obra, la cosa esta vez es distinta y los polacos entregan (al menos desde mi opinión) no solo uno de los mejores trabajos de su carrera sino también uno de los primeros grandes discos del año.
“ID.Entity”, octavo disco de los polacos Riverside, los encuentra mucho mejor enfocados, solventes, organicos, gancheros y por sobre todo nuevamente inspirados. Superada ya la pérdida de su compañero y todo el lio de la pandemia, los comandados por Mariuz Duda idearon una serie de canciones orientadas a un rock progresivo con algún que otro acercamiento al espectro alternativo donde los muchachos aparentemente se dieron una buena panzada de la discografia de Tool. Ojo, no digo que ahora se volvieron retorcidos como la banda de Maynard James Keenan pero de ellos han tomados ciertos recursos como lineas de bajo bastante mas agresivas que de costumbre pero no mucho mas de eso. El resto es Riverside apuntando a un rock progresivo de pura cepa pero imprimiendole su propia “Identidad” (el titulo del disco manda) y buen animo a este gran disco. Ya la entrada muy a lo Rush en los cumplidores sintetizadores en la movida Friend or foe contagia energía y muy buena vibra tanto en lo instrumental como en las voces de Duda que vuelve a sonar seguro y competente, no parece la misma banda que hace 5 años estaba llorando por lo rincones en un insoportable ambiente derrotista y de no saber para donde ir, pasando por el halo progreta y sumamente intrincado de la genial Landmine Blast con muy buenas y serpenteantes lineas de bajo muy a lo Justin Chancellor (Tool). La cosa se pone un poco mas pesada y oscurita en Big tech brother que aunque tiene sus bajadas de intensidad al menos suenan mas vitales y creibles. Post – truth es la que mas cercana es a su costado mas de metal progresivo por la dureza de los riffs pero que respetan el enfoque global y no suena para nada desubicada sino mas todo lo contrario: muy necesaria ¡ya que es un temazo de aquellos! Y por si no fuera poco tenemos los magicos 13 minutos de la inmensa The place where i belong que ademas de contar con muy buenos pasajes instrumentales e intrincadez progreta también se dan el lujo de conmover por igual con partes acústicas en transiciones nada forzadas. Una belleza. Para el final llegan los graves del bajo bien distorsionados en la fuerza avasalladora de I’m done with you y la onda luminosa de Self – aware que con la cantidad de recursos con los que cuenta en sus 8 minutos te dejaran maravillado junto con el tremendo resultado del disco.
La producción jugó totalmente a favor del enfoque y el mismo no pierde nunca el foco en las canciones: tanto las guitarras de distorsión rockera como la dureza del metal en algunos riffs fluyen en total unión y naturalidad, algo en lo que falló Queensryche con su regular y desparejo “Digital noise alliance” del año pasado. Ah y también esta bellisimamente adornado con sus teclas y sintetizadores al igual que en sus bases ritmicas…y no me olvido de la portada que hasta en ese item vuelven a estar inspirados. Justo cuando creí que iba a encontrarme con otra muestra de displicencia creativa, los polacos al verme desconfiado me dieron la primera patada en medio del culo con un tremendo disco que seguramente hará las delicias tanto de sus fans como de los adeptos al estilo.
MI PRIMER GRAN FAVORITO DEL AÑO, GRACIAS RIVERSIDE!
Riverside
Mariuz Duda: voz, bajo y guitarra
Maciej Meller: guitarra
Michal Lapaj: teclados, sintetizadores y coros
Piotr Kozieradzki: batería
Tracklist
1 Friend or foe
2 Landmine blast
3 Big tech brother
4 Post-truth
5 The place where I belong
6 I’m done with you
7 Self-aware
Dices sobre «“Love, fear and the time machine” que no tenía un rumbo definido, ¿desde cuando una obra ha de tenerlo? ¿De donde sacáis aquesas conclusiones? ¿Y en «Wasteland» como no iban a sentirse perdidos sin Piotr? Y desde luego, pensar de esta banda que lo único que sabe entregar es música bien hecha iba a sonar indiferente es craso error, porque otra cosa, no, pero son músicos estelares que ofrecen siempre calidad y puntos distintivos de un disco a otro. Y desde luego, estará entre lo mejor del año, que obras de esta categoría no se escuchan todos los días.
Desde cuando una obra debe tener una dirección definida? Pues desde siempre, porque de ser el caso contrario los discos se convertirían en una tediosa exposición de ideas sueltas y no habría algo muy importante en la musica: cohesión. Cosa que a mi entender le faltó a «love, fear and the new machine». Para «Wasteland» me quedó la sensación de que los tipos no supieron canalizar y hacer catarsis de su pérdida. Argumentos me sobran para sostener lo que pienso de ambos discos, que el lector crea que me equivoco queda a su criterio. Saludos y gracias por leer!