“Punto de inflexión”

Escrito por Moralabad

El pasado 18 de noviembre salió a la venta el nuevo y último disco de estudio de los británicos Threshold, bajo el título “Dividing Lines”, el cual es necesario más de una reproducción para tomarle el punto. Cierto es que la dupla compositiva de Karl Groom (guitarra) y Richard West (teclados) sigue en un buen estado de forma, aunque esta vez, y esto sí es algo poco habitual, han elegido un tema inicial poco rompedor, como nos tienen acostumbrados en los discos anteriores.

Así es, “Haunted” es de esas canciones con un buen comienzo, pero son esas pausas antes y después de cada estribillo las que no le favorecen para presentar el disco, sin dejar de ser un buen corte. Del estilo, con gancho y estribillo facilón en el que la voz de Morgan, su compositor principal, es también “King Of Nothing”, la que fuera usada como primer single y que no daba muchas esperanzas para el éxito de este disco.

Pero podría decirse que ahí quedan los dos momentos más flojos del disco, porque la pegadiza “Hall Of Echoes” con su progresivo más clásico, se queda en la memoria con pocas escuchas, la veloz y más regular “Let It Burn” con una gran interpretación vocal, al igual que “Lost Along The Way” son los dos momentos más atrevidos en cuanto a variedad instrumental. Si buscamos algo más intrincado, puramente técnico, para eso está el tercer single, “Silenced”, lanzado como videoclip, el cual es un claro ejemplo de sintonía entre voz e instrumentación, dejando claro que la complejidad puede también atraer con ritmos pegadizos y cambiantes sin aburrir.

Aunque el pelotazo del disco llega con las canciones largas, por un lado “The Domino Effect” en la que predomina su estribillo y sección instrumental muy al estilo de los discos previos. “Defence Condition” finaliza el disco con un ambiente épico y apocalíptico con una de las mejores canciones en la que aparece Glynn Morgan en las voces. Pero por supuesto, no se nos puede olvidar mencionar “Complex”, el segundo single y que, aquí sí, demostraron estar a un nivel muy por encima de lo demostrado en la primera canción. Se trata de un corte rompedor, directo y contundente en guitarra y batería, con un estribillo que refuerza la instrumentación y un puente que realza el tema convirtiéndolo en mi favorita del disco.

En definitiva, un disco muy por encima de lo esperado, que le hacen falta más de una vuelta para saborear todo su potencial y que gustará a los que busquen un sonido fresco, actual y moderno.

Canciones

1. Haunted

2. Hall Of Echoes

3. Let It Burn

4. Silenced

5. The Domino Effect

6. Complex

7. King Of Nothing

8. Lost Along The Way

9. Run

10. Defence Condition

Threshold

Karl Groom – Guitarra

Richard West – Teclados

Glynn Morgan – Voz y guitarra

Johanne James – Batería

Steve Anderson – Bajo

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