Perdiendo las 7 llaves”

Crítica escrita por: Christian Darchez

Alemania – Power Metal

A fines de 2016 se conoció la noticia que muchos no esperaban pero que si anhelaban y soñaban desde hace mucho tiempo en Helloween: el cantante y guitarrista Kai Hansen que abandono la banda en 1989 totalmente disconforme con los satrapas aprovechados del sello Noise y con el manejo de Rod Smallwood (manager de Iron Maiden) y el cantante Michael Kiske que había sido expulsado por Michael Weikath a fines de 1993 ya que según este ultimo, había sido responsable del declive artístico en discos como ¨Pink bubbles go apes¨ (1991) y ¨Chameleon¨ (1993); trabajos donde el cantante tuvo una mayor participación como compositor, volvían a las calabazas. Tanto la prensa como el publico se hizo eco de la noticia y el ahora septeto ni cortos ni perezosos anunciaron una gira mundial bautizada como ¨Pumpkins united¨ y aunque al principio fue algo accidentada (con acusaciones de Playback en Mexico por ejemplo) la misma fue un éxito tremendo en su conclusión; motivo por el cual decidieron editar el disco en vivo ¨United alive in Madrid¨ (2019) de su presentación en la capital española en 2017. Ya con el material suficiente, la banda entro al estudio para registrar el disco que hoy nos ocupa, pero como ya es sabido la pandemia retraso los planes de la edición y finalmente el disco vio la luz en Junio pasado de este año. Tal vez la culpa sea mía que el Power Metal ya no me prende como antes y menos aun tratándose de los denominados ¨padres del estilo¨, motivo por el cual no tenia demasiadas expectativas para con el (lo cual muchas veces es bueno, el riesgo de llevarte un chasco es menor así) y me duele en el alma decirlo pero el resultado final de la tan mentada reunión en este ¨Helloween¨ ademas de parecerme bastante aburrido es sencillamente desconcertante.

¨Helloween¨, décimo sexto disco del ahora septeto alemán, a mi parecer creo que el principal atractivo que posee pasa justamente por escuchar a Michael Kiske y Kai Hansen nuevamente en las calabazas que por el nivel de las canciones en si, y hablando del disco en términos musicales la idea de querer agrupar varias facetas que el grupo abordo en su carrera, desde los tiempos a puro Power de sus épocas de gloria junto a Kiske a fines de los 80’ con los ¨Keepers¨ hasta su lado mas global con Andi Deris  fue noble; pero el problema es que sin un hilo conductor mediante las canciones se convierten en un rejunte de partes inconexas que apuntan mas al puro fan service que a una perspectiva musical solida. Debo reconocer que la entrada con el Power acelerado de manual Out for the glory con Kiske cantando bien arriba como en los tiempos de antaño despierta el suficiente entusiasmo y energía que el disco debe tener, muy bien secundado por Hansen en algunas voces. Hasta ahí todo muy lindo, lo que precisamente el fan de Helloween busca y se siente satisfecho (y esta muy bien que así sea); pero es justamente con Fear of the fallen cuando Andi Deris entra en escena donde la disparidad hace acto de presencia y no es culpa de el sino por como estuvo encarado el lineamiento musical: la referencia del sonido clásico acelerado con el filo heavy actual se busca pero se encuentran muy poco en la misma, y mas con los interludios melódicos que no parecen cuajar del todo. Best time y su pulso firme parece un sobrante de Unisonic (de hecho suena idéntica a ¨Exceptional¨ del ultimo disco del grupo) que pese a algunas buenas ideas suena totalmente colgado en el álbum. Mass polution y su onda Hard rockera que aunque cuenta con un buen estribillo, las partes de corte ¨humoristicas¨ suenan totalmente fuera de lugar, una lastima porque es un terreno en el que Deris se mueve como pez en el agua. Angels pudo haber sido uno de esos puntos de inflexión en el que la banda mete en sus discos pero esa necesidad imperiosa de meter doble bombo termina arruinando el clima. A la inversa le pasa a Rise without chains un tema muy de la época de ¨Pink bubbles go apes¨ en esa linea acelerada y metiendo sonidos y riffs atípicos (algo que en esos tiempos espanto a los fans); pegadito te ponen un tema de carga pesada como Indestructible que pierde bastante tonelaje cuando la voz de Kiske entra en escena…bueno hay que amoldar el tema de acuerdo a su registro claro esta, sin importar eso que comúnmente se llama ¨cohesion¨. Robot king de seguir una linea pareja y agresiva hubiera sido mejor pero la premisa de ¨haz lo tuyo, Michael, justo donde Andi no llega¨ genera 2 temas distintos donde la fuerza y la pomposidad no se condicen demasiado con la composición. Cyanide y su pulso agresivo junto con la inicial ¨Out for the glory¨ me resulto quizás lo más parejo del disco donde hasta las partes mas rápidas suenan mas orgánicas. El inicio pseudo progreta de la acelerada Down in the dumps dentro de todo logra sonar efectiva merced a algunos cortes mas pesados aunque no pinten mucho en el mismo y la final y extensa Skyfall uno de los primeros cortes de difusión que al menos al principio me despertaba cierta simpatía, al escucharla ahora me produce el mismo efecto que el corte de Snyder de ¨Justice league¨: inconexión y capricho arbitrario entre partes aceleradas y otras mas melódicas para ver quien en el juego la tiene mas grande. El hilo conductor, como suelen decir los españoles, ¨A tomar por culo¨ 

La producción y mezcla a cargo de Charlie Bauerfeind y Dennis Ward también es complice de esa disparidad compositiva, no hubo nunca un nexo entre el sonido clásico y el agresivo para que todo forme parte de un todo; no hay ¨homogeneidad¨. Creo que desde ¨Pink bubbles go apes¨ que un disco de Helloween no tenia una producción tan floja (aunque en defensa del finado Chris Tsangarides como el aseguro tiempo después: ni la banda misma sabia bien que hacer en ese disco), ítem que en discos castigados por la prensa como ¨Rabbit dont come easy¨ (2003) y este mas por no tener el enfoque oscuro del exageradamente alabado ¨The dark ride¨ (2000) o el ultimo ¨My god – given right¨ (2017) estaba mejor cuidado. Se me ha pasado por la cabeza varias veces que a este ¨Pumpkins united¨ (ademas del fallecido Ingo Schwichtenberg) le falto obviamente el guitarrista Roland Grapow y el baterista Uli Kusch, pero pensándolo mejor dudo mucho que ambos se hubieran sentido conformes con el lineamiento de las composiciones y esta vez no haría falta que Weikath los expulse: solitos saldrían despavoridos! En definitiva, ¨Helloween¨ es un disco que agradara mucho mas al fan contento de la vuelta de los hijos pródigos a la banda ya que el disco tiene eso que tanto busca, no por nada ¨Helloween¨ es numero 1 en ventas en algunos países y en las reseñas no paran de llegarle loas, lo cual eso a mi no me parece mal. A mi personalmente la preponderación del fan service en este ¨Helloween¨ antes que un enfoque solido no solo me termino desconcertando sino también aburriendo…

2 Comentarios

  1. Al fin he conseguido sacarle un hueco para escuchar este largo disco (me refiero a la edición completa, japonesa y full power). La verdad es lo que esperaba, temas veloces, con arreglos de Hansen a las voces y duetos Kiske/Deris como demostraron en la gira de reunión, pero en temas nuevos. Hay buenos cortes, no me sé todavía los títulos, pero no me ha disgustado. Ahora, no creo que merezca tanto apremio como la prensa-fanservice les está inundando de flores. Es un buen disco, con grandes músicos, pioneros en lo suyo, pero no es ni lo mejor de Helloween ni lo mejor del power, como he visto por ahí. Saludos Christian, buena review!

    • Como decimos en Argentina ¨la nostalgia garpa¨, es mas, creo que este disco en unos meses va a quedar en el olvido absoluto (y mas cuando Maiden edite ¨Senjutsu¨ el mes que viene) y solo se va a hablar de el cuando tengan que hacer otra review de su siguiente disco

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